15.12.10

Nº 103
Diciembre de 2010 


SUMARIO


Protesta barrial
El motivo de la ruidosa queja se centró en la insólita actitud del Gobierno de la Ciudad de licitar la construcción de la sede del CGP5...


Carlos Terribili
Por Mario Bellocchio
Visitar su casa-atelier, escucharlo, ver sus obras, compartir unas horas de su mundo...


Sigue el engaño
Por Patricia Roselló
Mentiras e ilegalidades del Gobierno de la Ciudad en nuestro barrio


Desalojo y Muerte
Por Mario Bellocchio
Sobre el cierre de esta edición y ya sin tiempo para el análisis que el caso merece, se produjeron las terribles muertes del Parque Indoamericano...


Los “intereses” de Carrefour
Por Horacio Cafferata
La oferta de financiación a tres meses "sin intereses" se transforma, con eufemismos, en un oneroso 12% mensual de recargo


 Boedo en el centenario (V)
Por Diego Ruiz
Andaba nuestro cronista callejero, desde hace ya tres números, recorriendo la Boedo del Centenario acompañado, o más bien arrastrado, por José González Castillo...


El monumento a caperucita roja
Por Miguel Ruffo
La Caperucita Roja del francés Jean Carlus nos retrotrae a la infancia. 


En 12 días mas de 3000 ¡firmas!
Dando su apoyo a la iniciativa de Asociación Civil Cultural Ambiental Todos por la Plaza de Boedo se colectaron, en 12 días, más de 3000 firmas...


Wikiliando
Por Leonardo Busquets
En los tenebrosos años de la guerra fría, el patio trasero de los EEUU fue un banco de pruebas de todos los modelos represivos. 


Barriólogos
Por Angel O. Prignano
Homenaje permanente a los barriólogos porteños: un acto de agradecimiento.


CCCP5
La nota de apoyo enviada por el Consejo Consultivo Comunal Provisorio Nº 5 - Almagro y Boedo a nuestra Asociación Vecinal para apoyar el rechazo a la licitación de construcción del CGP en el predio de la plaza.


Nuestra amiga Haydée
Nuestra amiga Haydée, con la que hoy compartimos responsabilidades en Baires...


Definiciones del código de planeamiento urbano en la Ciudad de Buenos Aires
Con respecto a las interpretaciones que puedan darse a las definiciones de la ley 2266...(Colaboración del arquitecto Daniel Fusaro)


La virutera (Una Noche de tango): La Novela
Por Edgardo Lois
Quizás una de las razones para el intento de la escritura, sea el deseo, las ganas, de conservar determinados recuerdos u ocurrencias. 


Donación a la escuela Almafuerte
Ante la proximidad del centenario de la Escuela Nº 8 “Almafuerte” ubicada en Maza y Salcedo, el candidato a la presidencia de San Lorenzo, Marcelo Moretti, donó


Editorial
“Cruel, en el cartel...”
Peatonalización de cruces que nadie pidió ni eran prioritarios, por ejemplo, son un gasto inútil para el vecino...


VER, LEER Y ESCUCHAR
Crítica literaria, teatral y discográfica de producciones que no cuentan con el gran circuito de difusión alguna


POEMA
Soneto
Rubén Derlis


CULTURA GRATUITA
Guía de actividades culturales barriales que no requieren erogación 







Protesta barrial


El jueves 9, con la caída del sol, la esquina de Boedo e Independencia se pobló con una importante cantidad de vecinos que salieron a protestar convocados por la Asociación Civil Cultural Ambiental Todos por la Plaza de Boedo. El motivo de la ruidosa queja se centró en la insólita actitud del Gobierno de la Ciudad de licitar la construcción de la sede del CGP5 y futuro centro comunal aprovechando la estructura del edificio preservado como “área para eventos y exposiciones”, según reza el propio cartel de obra y solicitado legislativamente por la Asociación para albergar al Ecomuseo Participativo Barrial (EPB), usos de índole cultural compatibles con la ley 2266 que diera origen a la expropiación y rezonificación del predio (ver pág. 7). Los vecinos recorrieron luego la avenida Boedo hasta San Juan siendo muy festejado por el entorno barrial su correcto reclamo.•










Editorial
“Cruel, en el cartel...”


La señora se maquilla para disimular la papada, los ojos caídos y las arrugas que surcan profusamente su añosa piel. Y no estamos hablando de ninguna mujer en particular a menos que a “la” ciudad, que de ella se trata, pueda indentificársela por género.
Porque, convengamos, el Gobierno de la ciudad se ha transformado en experto en maquillajes. 
Peatonalización de cruces que nadie pidió ni eran prioritarios, por ejemplo, son un gasto inútil para el vecino, pero incomparablemente rendidor a la hora de mostrar “gestión”. Que a menos de un año de su finalización comenzaran a mostrar las falencias de su ejecución puede transformarse en un boomerang de destino previsible. Parece que a la señora ciudad le está fallando el “rimmel”. Endebles pilares rotos con hierros al aire, una importante cantidad de baldosones ya flojos que proyectan su acuífero envío en los días de lluvia, las pendientes de acceso vehicular gravemente deterioradas y, lo peor, la obstrucción de todas las rejillas de escurrimiento por la irregularidad de su higiene a la que sus proyectistas no dejaron otra alternativa que la aspiración. 
Mientras se reemplazan adoquines de las cunetas por cemento para un mejor escurrimiento de aguas –con destino incierto para nuestras venerables piedras boedenses– el Gobierno de la ciudad se hace el distraído con la renovación de las bicentenarias cañerías subterráneas colectoras necesitadas de otras dimensiones por el cambio de recepción de volumen de agua que la desaparición del adoquinado les genera. A la señora ciudad le preocupa el maquillaje para sus arrugas y se desinteresa de sus pulmones, que no se ven: nadie anda con una radiografía de tórax exhibiéndola por las calles y sobre todo a los electores.

Una plaza con canteros ¡seguro! es mejor que lo que tenemos hoy, que lo que vemos hoy ¡seguro..., seguro! –proclamaba hace poco el inefable y locuaz jefe de gabinete de ministros Rodríguez Larreta, cuando anunciaba a sus acólitos la permanencia del muro de Sánchez de Loria. Hay una larga enumeración de las cosas a las cuales es mejor una plaza con canteros. ¡Seguro, seguro, que es mejor! –para el disfrute de todo el vecindario, sin proscripciones sectarias– que un templo de culto religioso, como estuvimos en serio riesgo de tener si la presión de los vecinos no hubiera forzado la votación. Y a pesar de ello padecimos el voto en contra de la señora Gabriela Michetti.
Mientras tanto sigue la “obra para mostrar” y las aceleraciones: no vaya a ser que al jefe de Gobierno se le ocurra –¡perdón! a Durán Barba se le ocurra– adelantar la fecha de las elecciones porteñas y los macetones estén todavía llenos de yuyos.











Carlos Terribili
Por Mario Bellocchio
Quienes quieran conocer los hitos de la extensa vida artística de Carlos Terribili, pueden dirigirse al pie de este artículo donde presentamos una acotada síntesis. Sin embargo, esos lauros bien ganados, sólo reflejan pálidamente a un ser humano que empuña los pinceles como arietes dispuestos a sembrar sus profundas convicciones. Visitar su casa-atelier, escucharlo, ver sus obras, compartir unas horas de su mundo, es el humilde propósito de esta nota.


¿Cómo era “Carlitos” Terribili?
Yo nací aquí (pasaje Amberes, en Caballito norte), pero viví los primeros ocho años en Punta Alta, cerca de Bahía Blanca. Desde los ocho hasta los 20 –desde el 45, hasta el 57– nos vinimos a una casa de dos pisos que quedaba en un pasaje de una cuadra que se llama Lucero –Hipólito Yrigoyen al 3500–, a la vuelta de donde estaba la famosa quinta del Virrey Liniers, con el mirador y todo eso... Un par de días después de mudarme ya iba a la cancha de San Lorenzo. Es decir que yo era de Boedo, conozco ese barrio. (N. de la R.: en esa época los límites barriales eran imprecisos. Quienes vivían en las proximidades de la avenida Boedo decían pertenecer a Boedo. En 1972 se fijaron las demarcaciones barriales y esa zona quedó bajo la égida de Almagro). 
Para mí el barrio que gestó mi personalidad –pensá que estuve de los nueve a los veintiún años– es Boedo. Un barrio, aquel, de prostitutas, de carreros, de chorros... Pero yo vivía de casa en casa: no había ese problema de tanto cuidado. Eramos “todos” una gran familia. Nunca me voy a olvidar del carnaval: recuerdo una murga formada por unos tipos de galera con un muerto y un cajón. Jamás en mi vida vi algo igual. Esas cosas son parte de la infancia de uno, de la adolescencia. Hacíamos murgas nosotros. Nos disfrazábamos. Ibamos a juntar monedas y mi familia me quería matar. “¡Vos no necesitás...!” –me decían en casa–. Era un gusto, cantábamos cantitos verdes y nos daban unas monedas, y después íbamos a comer pizza con lo que ganábamos.


¿Qué reflejan tus pinceles y por qué?
Yo tomo como temática de mi obra los elementos culturales que surgen desde la base del pueblo. Siempre fue así aún en mis momentos más elitistas. Mis primeros diez años como pintor hice pintura abstracta, no figurativa, pero en mis temáticas, yo tomaba como punto de referencia las imágenes de los pueblos precolombinos. Quiere decir que yo ya estaba buceando con las figuras que tienen que ver con nuestra idiosincrasia. Yo me había hecho una consigna y la discutí con mis compañeros: que a mí no me interesaba Europa -padre y madre tenemos todos-. Yo tomaba como referencia mi América porque la caminaba, la vivía, la conocía, tanto en Buenos Aires como en el interior. O por los provincianos que venían acá. Para mí tenía una raíz, no por un chauvinismo argentinista, sino por una necesidad geográfica de representar y defender a la cultura y al lugar donde yo vivo. Y respetando los grandes valores de Picasso, de Miró... Ellos son Europa. Era otra cultura y eso me molestaba: estar pendiente de que pasa en Europa para hacerlo acá tarde y mal. Yo trabajé siempre con esa cosa de América Latina.


La figura humana es tu notable eje. ¿En qué momento elegiste este camino?
Hice paisaje y naturaleza muerta por imposición de la escuela. Yo siempre tuve facilidad o placer íntimo de representar y compartir la figura humana, no solamente el retrato: la figura, el cuerpo. Y en particular los seres humanos más perseguidos. La clase más sufrida tiene una expresividad de la que carecen, evidentemente, las clases sociales más altas. Recorrí el norte, estuve en Jujuy, Catamarca, la Puna, Bolivia, Perú... Eso me empapó de una imagen de América que ahora tengo la satisfacción de ver que se está integrando, no digo en una sola cultura, pero casi, en una única intención. Esperemos que siga, que dé frutos, esa es la razón. Adopto la figura humana porque considero que expresa mi necesidad de un rechazo o una denuncia contra la injusticia o la explotación: ¡qué mejor que el ser humano para representar el dolor y la injusticia!


¿Cual es el “Big Bang” de tu producción artística?
Primero surge el cuadro y después el tema. Yo no tengo un motivo cuando voy a pintar. Primero voy pintando y después se me ocurre, tengo una necesidad, escucho un tango, alguien habla; leo un libro y eso lo asocio al tango y se despierta en mí una reminiscencia tanguera. Digo tango como podría ser otra cosa, pero en este caso... Una vez que siento ese impulso, a partir de ponerme frente a una tela, empiezo a garabatear sensaciones, es decir: qué es un tango para mí: la mina, el banco, la esquina, el buzón, el tranvía, los cuentos de mi abuela –que me contaba del tranvía a caballo–... No sé, uno es como un medium, atrae energías. Yo no soy creyente pero, en esto de la creación artística, uno es como un pararrayos y atrae ciertas cosas. A partir de ahí empiezo a gestar una imagen que surge de la necesidad de vivenciar el Buenos Aires en el que yo era pibe..., hasta que la compongo. Podría ser como Borges –que esta ahí atrás– con el cuento del cuchillero Jacinto Chiclana; eso también es producto de un estado emocional  del tipo que se jugaba la vida. Así se va gestando la figura y una vez que esta pintada le pongo el título. 


¿Así nació el cuadro que donás a la Asociación de vecinos de la plaza?
Claro. Una alumna que pasaba lo vio y dijo: “este tango es 'Atenti pebeta'”. Y después me dio el justificativo. La pintura en sí es una escena irónica con la temática machista del tango. En el “Atenti pebeta” es como que el tipo está con el bandoneón muy entusiasmado, el almanaque, el cajón, la mesa de luz..., evidentemente, es toda la escenografía tanguera. El tipo está tocando un tango y la pobre mujer está ahí y no la atienden. 
El arte puede tener una intención del autor pero ese propósito es lo suficientemente amplio como para que cada espectador cree su propia película. Yo veo esto y vos podés ver otra cosa. 
El tipo toca el bandoneón y está en lo suyo. La mujer desnuda..., y el tipo no le va a dar ni cinco de bola. Todo esto no tiene nada que ver con la obra de arte. Es una anécdota en donde la obra podría ser otra cosa y es lo mismo. Del cuadro pensé: no sé dónde regalarlo: en el barrio, en un boliche..., y tiene que ser en Boedo. 


¿Qué pasa con tu postergado mural de Felipe Vallese?
Hace tiempo un grupo de vecinos vino a pedirme que, ya que era un pintor conocido del barrio, por qué no hacía algo para el barrio y en el barrio. Yo dije que sí y ellos me preguntaron qué podía hacer. Dije que conocí a alguien con quien la  historia argentina tiene una deuda pendiente: Felipe Vallese, quien fue, casi, el primer desaparecido. Me dijeron que sí. Vimos gente, allá por el 2003. Presentamos el proyecto y la Legislatura, por unanimidad, lo aprobó. El lugar de destino del mural era lo más cercano posible a donde sucedió el hecho. Y para poner un mural tan grande (dos metros por cuatro) lo más cerca era Plaza Irlanda. 
En el ínterin, en un asado con los vecinos, empecé a decir lo que pienso, como ciudadano de Buenos Aires, sobre la resistencia peronista y su supervivencia a través de años y años, que es coincidente con lo que me impulsa para pintar. La cuestión es que, en la sobremesa, empecé a hacer una alabanza de lo que Vallese significaba; la asamblea barrial pasó de ser aliada a sabotear. Y el proyecto se postergó. Ni Ibarra, ni Telerman, ni ahora Macri, le dieron bola nunca. 
Por otro lado, y esto es parte de la anécdota, gente del Partido Socialista –con el que no tengo militancia ni conocimiento–, andando por Flores, vieron mi mural de la estación, recapitularon sobre mi obra y me propusieron como Ciudadano Ilustre. En la entrega de la mención en la Legislatura dije unas palabras de agradecimiento. Y del agradecimiento pase a la queja sobre el proyecto Vallese. Me ayudaron mucho, me apoyaron económicamente y me mandaron gente. El cuadro está terminado y preparado para la intemperie, guardado en un depósito del Partido Socialista. Y no se coloca en su sitio por una traba burocrática. Levanto mi protesta, no por artista frustrado, sino por la devoción que tengo por ese tipo. Tenía casi la misma edad que él y fue una conmoción en el barrio. Que yo pueda  hacer un mural sobre ese personaje que es simbólico –era un chico de 21 años que murió por sus ideales– es un broche a mi carrera. No tengo 40 años, tengo 74, entonces, esa es mi ansiedad. 


¿Dónde pensás que está detenida la instalación de la obra? 
Yo creo que es una mecánica del Gobierno de la ciudad, ellos sólo accionan por posibles o futuros negocios: donde ven la posibilidad de vender, comprar, gerenciar o derivar a sus amigos, familiares, empresas o trabajos... Se mueven con ese criterio.
Es obvio que Macri no tiene nada que ver con la cultura y esa es la política que impera: una cultura del espectáculo barato de Tinelli, de Mirtha Legrand. Yo pienso que es un mal que acarrea desde el vamos este gobierno de la ciudad, mucho peor que los anteriores. Lo mismo que pasa en la plaza de Boedo es lo que yo te estoy contando de mi mural de Felipe Vallese.


Siempre remando contra la corriente...
No cuentan con que ya estoy acostumbrado. Toda mi familia era radical y yo peronista. Todos de River o Boca y yo de San Lorenzo, el equipo de fútbol al que adherí por simpatía, no por herencia.
Mi familia era de clase media y yo vago...,  y reo. Vivía en la calle, pateando la pelota, era otro mundo.  Cuando me fui a Bellas Artes mi vida de barrio se fue a la mierda, porque me metí en un ambiente distinto: los conciertos, la literatura, cosas que para mí eran ajenas. 
Pero mi infancia y mi juventud quedaron allí, en ese lugar. Quizá por eso, mi primera necesidad emotiva es Boedo. 


Carlos Terribili

  • Nació en  la Ciudad de Buenos Aires en 1936. Egresó de la Esc. Sup. de Bellas Artes  Manuel Belgrano y Prilidiano Pueyrredón, donde estudió, entre otros, con Ideal Sánchez, Luis Barragán, Onofrio Pacenza, Juan Battle Planas, Héctor Cartier y Víctor Chab.
  • Lleva realizadas alrededor de 350 exposiciones en Argentina, Perú, México, Venezuela, EE.UU., Uruguay, Cuba y España.
  • Ejerce la docencia desde 1963. Actualmente dirige los talleres de dibujo y pintura  sobre figura humana de la Asoc. Estímulo de Bellas Artes.
  • No participó nunca en ningún salón competitivo o con premios.
  • Fue presidente de la Comisión de Artistas Plásticos del Consejo Argentino de la Paz, adherido a Naciones Unidas.
  • Participó en 1983 y 1984 en “Teatro  Abierto”.
  • Realizó una serie de dibujos sobre originales manuscritos por Atahualpa Yupanqui, Jorge L. Borges, Armando Tejada Gómez, Homero Expósito, Raúl González Tuñón y Elías Castelnuovo, entre otros.
  • Poseen cuadros suyos los museos de Mercedes (San Luis), Posadas (Misiones); Chascomús, Azul y Tandil (Bs. As.); Museo de Bellas Artes (Cap.), Octavio de la Colina y Olta (La Rioja), Casa de las Américas (Cuba), Mataró (España), los Museos del Che de  Bs. As. y Santa Cruz, Bolivia y el ECUNHI (ex Esma).
  • Ilustró más de 40 libros de ensayos, cuentos y poesías.
  • Ilustró en diversas revistas literarias nacionales y extranjeras (México, Costa Rica, Honduras, Venezuela, Chile, Uruguay, Cuba y España).
  • Colaborador permanente de diarios de Capital e interior del país.
  • Realizó más de 20 afiches para obras de teatro y para distintas agrupaciones..
  • Entre los importantes murales realizados se destacan: el de la estación Haedo y el de la estación Flores del F.C. Sarmiento, el de la Unión de Trabajores de Prensa (UTBA), el de la Asoc. Estímulo de Bellas Artes, el del Museo del Che y el del Hotel Bauen.Colaborador permanente de la Asociación Madres de Plaza de Mayo.
  • Colaborador de la Revista de Madres de Plaza de Mayo (Línea fundadora).
  • Colaborador de las publicaciones de la CTA (Conf. Trab. Argentina) y ATE (Asociación Trab. Estado).
  • Realizó afiches para diversas instituciones humanistas. Sus obras fueron reproducidas en Cuba, Uruguay, Puerto Rico, Honduras, Venezuela, Alemania, Francia, España y Holanda. 
  • En 1996 invitado por el Gobierno de Cuba y la Unión de Escritores Cubanos (U.N.E.A.C.) realizó en La Habana, una muestra de más de 100 dibujos sobre el tema de Derechos Humanos. 
  • En el 2000 muestra en la Habana, con la Delegación Argentina al Festival de Tango.
  • En el 2003 la legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires aprobó su proyecto mural sobre los desaparecidos, en la figura de Felipe Vallese, (en realización).
  • En el 2004, fue elegido padrino de los Centros Culturales de la C. A. B. A. por el Gobierno de la ciudad.
  • En 2007 fue declarado Ciudadano Ilustre de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.•













Sigue el engaño
Por Patricia Roselló


Mentiras e ilegalidades del Gobierno de la Ciudad en nuestro barrio


Después de más de 35 años en que los vecinos luchamos por conseguir un espacio verde en nuestro querido barrio, la soñada plaza está en construcción. 
Pese a lo conversado sobre la fiscalización de obra –y la emisión de circulares al respecto– sólo se pudo ingresar una vez al predio y no fue, como estaba previsto, para que los vecinos, a través de su institución representativa, pudieran fiscalizar los trabajos, sino para recibir malas nuevas de parte de las autoridades: fue el 7 de agosto de este año cuando Larreta nos “reveló” que el muro de Loria es histórico. 
Más recientemente, en la Balear, nos enteramos por boca de una legisladora del PRO que se había licitado la construcción del CGP5 en Carlos Calvo y Virrey Liniers. Mentira distractora a la espera de la apertura de los sobres que finalmente se produjo el 25 de noviembre ya que, obviamente, se sabía que el edificio licitado era el preservado histórico de Carlos Calvo y Sánchez de Loria, según indica la ley 2266, “para ser destinado a (...) usos complementarios compatibles con la zonificación UP”. Actitud con la cual no sólo se viola la ley 2266 sino que se altera la finalidad del edificio que los vecinos hemos solicitado se incluya en la ley de Unidad Ambiental, proyecto en estado legislativo Nº1635-p-2010, para que funcione en él un Ecomuseo Participativo Barrial (EPB) que cumple con la función que estipula la ley. 
El Gobierno de Mauricio Macri parece desconocer la ley 2266, de febrero de 2007, en la que se declara “de utilidad pública y sujeto a expropiación, de conformidad con la Ley N° 238, al predio conocido como ‘Estación Vail’ en el barrio de Boedo”, se lo desafecta de la “Zonificación R2bI” y se lo afecta a “Distrito de Zonificación UP (Urbanización Parque)” (...) “para que se construya la plaza ‘Mariano Boedo’”. 
Los vecinos nos oponemos a que el Gobierno de la CABA cambie caprichosamente lo estipulado por la ley y repudiamos estas medidas con las que pretende acostumbrarnos el PRO a sus reiteradas trasgresiones e irregularidades. 
La Asociación Civil Cultural Ambiental Todos por la Plaza de Boedo, ha recurrido a la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires para que interceda por los vecinos. 
Y litigará contra las autoridades, si es necesario, si desoyen los reclamos pidiendo plaza “plaza”, defendiendo “su” ley 2266, para obligar al Gobierno a dejar sin efecto el trámite licitatorio en curso. Ya se llevan recolectadas más de tres mil firmas al respecto y nos juntamos el jueves 9 para darle voz al reclamo. 
Convocamos a los vecinos a vincularse con nuestra asociación para que juntos obtengamos nuestra plaza tal como la soñamos. 
www.plazadeboedo.blogspot.com
plazadeboedo@yahoo.com.ar








Definiciones del código de planeamiento urbano de la Ciudad de Buenos Aires
Con respecto a las interpretaciones que puedan darse a las definiciones de la ley 2266 en cuanto al significado de la denominada urbanización parque y el uso que el Gobierno de la ciudad pueda asignar a las parcelas de tal naturaleza. El Código de Planeamiento Urbano vigente determina:

Sección 5 
Zonificación en distritos
5.4.10 Distrito Urbanización parque -UP
1) Carácter: corresponden a zonas destinadas a espacios verdes o parquizados de uso público.
 2) Delimitación: según plano de zonificación.
 3) Disposiciones particulares: en estos distritos el gobierno de la Ciudad podrá autorizar obras de exclusiva utilidad pública que complementen y no alteren el carácter de los mismos.

Luego en la Sección 1 (Generalidades)
1.2 Definición de términos técnicos.
1.2.1.1. Relativos al uso.
Uso: el uso de un inmueble es la función o destino para el cual el terreno, el edificio o estructura asentado en él, ha sido diseñado, construido, ocupado, utilizado o mantenido.

Uso Complementario: el destinado a satisfacer, dentro de la misma parcela, funciones necesarias para el desarrollo del uso principal.
Espacio verde público: es el área destinada a uso público parquizado o agreste cuya característica es el predominio de especies vegetales y suelo absorbente.

Oficina pública con acceso de público: local o edificio de la administración pública nacional, provincial u oficial o de entidades descentralizadas, empresas o sociedades del Estado, con afluencia masiva de público.

(Colaboración del arquitecto Daniel Fusaro)












Desalojo y muerte
Por Mario Bellocchio


Sobre el cierre de esta edición y ya sin tiempo para el análisis que el caso merece, se produjeron las terribles muertes del Parque Indoamericano –como las calificó el ministro de Justicia Julio Alak–.
Ya que la investigación no provee aún conclusiones certeras y las circunstancias recogen versiones de todo tipo, lo más atinado es esperar, sin otros comentarios, y reflejar únicamente hechos puntuales y comprobados.
En la víspera del trágico suceso los medios ya tenían asentados enviados especiales ante el cariz que estaba tomando la ocupación del predio con total ausencia policial.
La pregunta que cabe de inmediato es: ¿qué se entiende por labor de prevención?
Y, cómo pueden calificarse los incalificables comentarios del “todoterreno” Horacio Rodríguez Larreta: no podemos solucionar los problemas habitacionales del Mercosur. ¿Xenofobia? ¿Incapacidad? ¿Impotencia? ¡Ay, Larreta! A veces uno termina preguntándose sobre este personaje: ¿es, o se hace? 










Los “intereses” de Carrefour
Por Horacio Cafferata


La oferta de financiación a tres meses "sin intereses" se transforma, con eufemismos, en un oneroso 12% mensual de recargo


Si usted necesitara un reproductor de DVD (es un ejemplo, podría ser cualquier otro producto), bastaría con arrimarse a algún centro de ventas de estos aparatos y elegir el que lo satisface. Calidad, precio de venta, probable financiamiento..., ¡ah, ah, ah! Aquí tenemos un escollo que empresas como Carrefour le solucionan prestamente. Al instante le otorgan una tarjeta de crédito para compras internas con el solo requisito de presentar su recibo de haberes y una factura de servicios a su nombre. Al toque le dan el plástico y ¡a comprar se ha dicho!
–¿Cuánto vale éste?
–Docientos setenta y nueve.
–¿Y cómo se puede pagar?
–Hasta seis meses, sin interés.
–¡Sin interés! O sea..., en tres veces ¿cuotas de cuánto?
–¡A ver...! Tres cuotas de noventa y tres.
–Lo llevo.¿Cómo sigue la cosa...?
–A fin de mes le llega el resumen por correo. Usted lo presenta junto a su tarjeta en cualquier caja del “super” y paga.
–De acuerdo. Gracias, buenos días.
Estrenado exitosamente el aparato, vistos los primeros treinta días de videos y canciones, llega el dichoso “resumen” al buzón casero. Rutinario desgarro de sobre para que emerja la, aparentemente, inocente factura. Saldo del resumen actual: $ 157.24.
Debe haber un error, lo mío es de $ 93 por mes así que... Señor msmsss, sí, soy yo. Domicilio msmsss, sí es aquí. Entonces, a ver el detalle:
Carrefour San $ 279,00 TEM00, C0 01/03: $ 93,00 (vamos bien). Distribución de resumen: $ 1,94 (¡Carito el correo!). Mantenimiento de cuenta: $ 14,00 (deben ser las expensas). Seguro sobre saldos financiados: $ 1,39 (¿con qué no “curran” los seguros?). Arancel anual: $ 36,00 (¿arancel de qué? ¿Tendré algún palco VIP con semejante cuota de socio? Adviértase que es casi el 35% de la cuota). IVA $ Consumidor final: $  10,91 (¿no era obligatorio que el IVA esté incluido en el precio que se oferta?).
Conclusión: en lugar de los prometidos $ 93 por mes..., ¡$ 157,24! ¡69% más caro!
Inútil protestar: está todo escrito en la famosa letra chica que nunca se lee, pero se sufre.
¡Cuándo será el día en que nos acostumbremos a pedir “las condiciones” fijadas en tipografía microscópica, llevárnoslas a nuestra casa, leerlas y volver a dar la conformidad!
¡Y exigir que nos den una copia de lo que firmamos!
Luego de otras dos mensualidades con parecidos agregados a los famosos 93 de base, uno termina pagando $ 383,21 en lugar de $ 279.- 37% de “recargo” por tres meses de financiación: un poco más del 12% mensual. ¿Usurario, no? Eso sí: ¡sin intereses!


Así que ya sabe: si Carrefour se ofrece generosamente a financiarle la compra de sus mercaderías, cuando le digan “sin interés”, revise minuciosamente la letra chica si no quiere encontrarse con sorpresas.•










Boedo en el centenario (V)
Por Diego Ruiz

 


Andaba nuestro cronista callejero, desde hace ya tres números, recorriendo la Boedo del Centenario acompañado, o más bien arrastrado, por José González Castillo. Ya estaban en el cruce de Estados Unidos y el joven dramaturgo no cesaba de apurar a su contertulio:
–¡Apriete el paso, le dije, que no vamos a llegar nunca a nuestra cita!
–Mire, don Castillo, ya le dije que el que se para en cada puerta para refregarme su conocimiento arrabalero es usted... Y yo ya voy echando los bofes.
–¡Pero no sea flojo, don cronista, que ya estamos llegando! Unos metros...
–Desde el Centro que me trae usted engañado que ahí nomás, ahí nomás, y no llegamos nunca.
–Bueno, no se queje, que ha tenido una clase magistral de vida del suburbio. ¡Guarda el tranvía!
–¡Pero, caray, por qué no avisa antes que hay una estación!
–Si usted papase menos moscas... Pero mire, esta es la estación del Anglo, que antes era de la empresa La Capital del francés Teodoro Vail. Bueno, en realidad Vail se la compró en 1889 al fundador, Wenceslao Villafañe, y la electrificó. Se ve que era un gringo progresista de esos que le metían a todo electricidad. Incluso creó un enorme taller que está acá nomás, en Loria y Carlos Calvo, pero una cosa es ser un visionario y un gran técnico, y otra es pelear con los tiburones de las finanzas. La Anglo fue comprando a todas las compañías y Vail tuvo que vender el año pasado, por lo que ahora sólo queda en la competencia Lacroze, en uno de cuyos coches vinimos.
–Don Castillo, usted es un libro abierto... ¡Hasta de ingeniería sabe!...
–Mire, don cronista, como siga tomándome a la chacota va a aparecer en la punta de un trolley... Pero, sienta el olor a factura y masitas... Preste atención, que esta es la panadería y pastelería más antigua del barrio, junto con la de Alberio en Quito 3867. La fundó un italiano cuyo nombre ahora no recuerdo, como la mayoría de estos negocios, pero ahora la explota Julián Arruela. Pero crucemos, que vamos ahí enfrente.
González Castillo se refería a un café y bar ubicado en el 745, en cuya chapa de permiso figuraban como socios “Pato y Littre”. Ingresaron a un ambiente bastante cargado tanto de personas como de humo, y el cronista no pudo evitar cierta inquietud al ver la catadura de algunos parroquianos.
–Perdóneme, don Castillo, ¿está seguro que aquí es la cita?
–Por supuesto, ¿por qué lo pregunta?
–Porque no me parece un lugar propio de una peña intelectual. Nada que ver con “Los Inmortales” de Corrientes y Suipacha, donde tallaba Florencio Sánchez, o con la del café “Carioca”, donde he visto a Alberto Ghiraldo, a Evaristo Carriego, a Ricardo Rojas..., al mismísimo Rubén Darío... Algunos de los contertulios parecen salidos más bien de una peña de la Penitenciaría Nacional...
–No me venga con prejuicios, don cronista, ni con esas pavadas que ha dicho Lombroso y más de uno repite como cotorra, empezando por Ingenieros... La que usted ve es toda gente de aquí del barrio y además, para desmentirlo, no faltan los intelectuales, como usted dice... ¿Ve ese señor de bigote caído y frente más que amplia, en la mesa del fondo?
–Sí, lo veo.
–Pues bien, señorito, ese señor al que usted acaba de adjudicar facha lombrosiana es nada menos que don Ezequiel Soria, gloria del teatro nacional que vive aquí por Parque Patricios. No solamente es un gran autor, sino que favoreció la carrera de Florencio Sánchez y del rosarino García Velloso, que ahora tanto éxito tiene. ¡Pobre Sánchez!, ahora que por fin había pelechado se nos viene a morir el pasado 7 de noviembre, para colmo en Milán, él que era más criollo que el mate.
–Bueno, no se ponga así, don Castillo. Sé que usted lo apreciaba mucho a Florencio, pero también sabe que la tuberculosis no perdona.
–La tuberculosis, sí, y la miseria, y la mala alimentación, y la bebida, y... Mire, no quiero emocionarme, ¿qué quiere tomar? Aquí tienen caña de durazno y de ruda, ajenjo, caña paraguaya, guindado oriental, cerveza, vino de bordalesa...
–¡Qué bonito! Usted me ha encajado varios manifiestos en contra del alcohol como veneno de la clase obrera y ahora me incita a empinar el codo...
–Pero no, déjeme terminar. También hay limonada con diferentes gustos, pues a lo gaseoso le mezclan jugo de grosella, de frutilla o de tamarindo. Y si no, se puede tomar un “5 y 5”, esto es cinco centavos de cerveza o vino, y otros cinco de limonada.
–Bueno, eso quizá se lo acepte, don Castillo, me parece más inocuo.
En ese momento se acercó a la mesa un hombre de mediana estatura, flaco como limón exprimido y de rasgos achinados. Vestía todo de negro, desde el zapato hasta el sombrero y llevaba una maletita en mano.
–Buenas tardes, don Castillo– dijo al pasar.
–Buenas tardes tenga usted– respondió amablemente el dramaturgo, y la inquietud del cronista ya fue incontenible.
–No, esto ya es demasiado, don Castillo. No me va a decir que ese personaje, que parece escapado de Ushuaia, es un intelectual del barrio.
–Pero no, hombre, no es del barrio sino de más allá, hacia Corrales. Más propiamente, suele parar por el mercado de Liniers y Salcedo. E intelectual... Bueno, habría que ver qué entiende usted por intelectual.
–No me embrome, don Castillo.
–No, mi amigo. Lo que pasa es que ese hombre aplica el intelecto a otros menesteres que algunos llaman escruche, o sea abrir cajas fuertes y otras puertas. ¿Vio la maletita, como de comadrona, que lleva en la mano? Ahí lleva las herramientas, que a propósito tienen unos nombres de lo más interesantes: jirafa, bandera, monseñor...
–Bueno, veo que estamos en plena apología del delito. La verdad no entiendo esa fascinación que tienen ustedes, los anarquistas, por los delincuentes, las prostitutas y demás lindezas de la sociedad.
–No sea duro, don cronista, ni conmigo ni con ellos. Yo no los defiendo ni los justifico, sólo trato de comprenderlos para poder denunciar mejor a la inicua sociedad que los ha llevado a esa vida... Usted no se ha equivocado en lo de Ushuaia pues Eufemio Pizarro, que ese es su nombre, tiene varias reincidencias y ante cualquier desliz lo pueden mandar allí, de donde pocos vuelven.
–¡Ay, don Castillo, usted es incorregible, pero debo reconocer que lo deberían canonizar como santo! Bueno, dejémoslo ahí, ¿a quién esperamos?
–A unos muchachos que quieren armar un grupo filodramático. ¿Se acuerda que le comenté de la Sociedad Progreso de Almagro, en Venezuela 3679? Bueno, allí hay tres hermanos, Mario, Juan y Mariano Fassi, que han tenido esta iniciativa y hasta nombre han elegido, “Círculo Molière”. ¿Qué le parece?
–Muy encomiable, realmente, pero esos proyectos implican gastos...
–Todo previsto, otros dos integrantes tienen una carnicería en la esquina sudoeste de Venezuela y Yapeyú, los hermanos Conte, que van a ser algo así como los capitalistas...
–¿Y usted, don Castillo, qué pito toca?
–¡Usted es un maleducado y un irreverente! Los muchachos quieren que los aconseje y los guíe, al fin y al cabo algo he hecho en materia de teatro, caramba. Mire, cronista, y ya ve que le retiré el “don”. Váyase con viento fresco y déjeme esperar tranquilo a los muchachos, pues ya veo que usted no aprende ni con la letra ni con el ejemplo.
–¡Pero que había sido cascarrabias! ¡No tolera un chascarrillo!
–¡Ni chascarrillos ni impertinencias! ¡Diga que mis principios me lo impiden, sino lo retaba a duelo en algún potrero! Mejor vuélvase al Centro, donde parece sentirse más a gusto.
Y el cronista no quiso echar más leña al fuego. Pensando en que ya tendría ocasión de disculparse porque si bien el mal genio de González Castillo era legendario lo era también su bondad, se fue caminando hacia Belgrano chiflando bajito, para tomar el tranvía 20, luz azul y verde, que lo dejaría nuevamente en Sarmiento y Esmeralda.•










El monumento a caperucita roja
Por Miguel Ruffo


La Caperucita Roja del francés Jean Carlus nos retrotrae a la infancia. A los relatos escuchados con asombro y sin aliento y a ese universo intangible de las fábulas y de los cuentos. El grupo escultórico, único por su temática, tuvo varios emplazamientos previos. Desde 1972 se encuentra en este parque que consideramos es el entorno adecuado para la historia del lobo que amenaza a la niña en el bosque, ya que la vegetación natural se funde con la vegetación marmórea trabajada por el escultor. (1)
En efecto, Buenos Aires es (por el momento era y ya señalaremos la razón) una de las dos ciudades del mundo que tiene un monumento para recordar el cuento tradicional “Caperucita Roja”. Decimos tradicional y no cuento moderno.
Nos encontramos frente a un producto literario antiquísimo transmitido oralmente y recogido por escrito por los hermanos Grimm. Lo que fundamenta la celebridad de los hermanos Grimm –Jacob Ludwig (1785-1863) y Wilhelm Karl (1786-1859)– no son tanto sus importantes trabajos de filología, lingüística e historia literaria como la permanente lectura, a través de las generaciones, de sus “Cuentos infantiles y del hogar (...) un conjunto de obras injustificadamente relegadas al ámbito de la llamada literatura infantil y juvenil (2). Tenemos, por un lado, el bosque medieval europeo, un bosque que cubría gran parte del viejo continente, en una época donde la mayor parte de la población era campesina y vivía en aldeas que se levantaban en los claros del bosque. Por el otro lado, los bosques de Palermo, como popularmente se los llama. Pero estos bosques corresponden a una época de predominio urbano, donde las grandes megalópolis como Buenos Aires, concentran a la mayor parte de la población mundial. Tenemos, asimismo, una sociedad de cultura oral (en la Edad Media era muy escasa la población que manejaba la lectoescritura); por el otro, una formación social, mayoritariamente letrada, informada (otra cuestión es que se lee y cual es la información que nos brindan los medios de comunicación de masas) y ahora inmersa en la revolución de las comunicaciones (celulares, mails, Internet). En tercer término, nos encontramos con una sociedad donde la sabiduría de los ancianos era valorada y en el otro extremo, el de la actualidad, una sociedad que rinde culto a la juventud y donde los ancianos perciben magras jubilaciones y parecería que ningún saber pueden transmitir. En otras palabras, la sociedad burguesa contemporánea, descarta a los ancianos, a los “viejos”, como si fueran trapos ya utilizados y en el hoy descartables. Un mundo donde lo juvenil es tan pregnante que muchas madres quieren ser como sus hijas. Es la locura de la cultura de la instantánea juvenil. ¿Qué puede enseñarnos hoy Caperucita Roja?.
Los consejos que la madre le da a caperucita, en su travesía por el bosque hacia la casa de la abuela, son las sabias lecciones de la experiencia: en el bosque no sólo se encuentra uno con las agradables flores y los árboles majestuosos, sino también con el peligro que acecha, representado por el lobo del cuento. La experiencia enseña y caperucita lo comprenderá después de desobedecer los consejos de su progenitora. ¿Qué enseña Caperucita?. A obedecer los consejos de los padres, porque la experiencia de estos, es la indicación certera para no extraviar el camino. Hoy tenemos, un mal llamado “bosque”: el de cemento, el de la urbe que todo lo devora. Es muy fácil caer víctima de la droga, del consumismo desenfrenado, del “gatillo fácil”, de la soberbia que implica “la juventud divino tesoro” y que conduce a desdeñar los consejos de los padres. En una sociedad que pretenda perdurar en el tiempo es muy importante la transmisión de los conocimientos y experiencia de una a otra generación. El viejo mandato bíblico de “honrarás a tu padre y a tu madre” conserva una plena actualidad que debe ser rescatada para cimentar la identidad social.
Una sociedad que pierde la conciencia del pasado es una sociedad que está destinada a perecer en el futuro. Es una sociedad, no sólo con un presente incierto, sino con un presente de sepelio. Por el momento Buenos Aires perdió el monumento a “Caperucita Roja”. 
Hace ya más de un año que fue retirado de su emplazamiento, para una exposición que se hizo en el Centro Cultural Recoleta, donde se le hallaron diversas roturas y el departamento del Gobierno de la Ciudad, Monumentos y Obras de Arte, lo retiró a sus depósitos para restaurarlo. Hagamos votos para que la ciudad vuelva a contar con el monumento a “Caperucita Roja”; es no sólo parte de la memoria urbana, sino una enseñanza de la sabiduría de las generaciones que nos preceden en la vida. 


NOTAS:
(1) MAGAZ, María del Carmen; “Monumentos y Obras de Arte” en BERJMAN, Sonia y SCHÁVELZON, Daniel; Palermo. “El Parque 3 de Febrero de Buenos Aires”, edhasa, Bs As, 2010,p 228.
(2) GRIMM, Jacob y Wilhelm; “Cuentos”, Alianza, Madrid, 1993 (Presentación en la contratapa)•










En 12 días más de ¡3000 firmas!
Dando su apoyo a la iniciativa de Asociación Civil Cultural Ambiental Todos por la Plaza de Boedo se colectaron, en 12 días, más de 3000 firmas de vecinos que estuvieron de acuerdo con el texto que encabeza las planillas:


LA PLAZA "Mariano Boedo" ESTA EN PELIGRO
Violando la Ley 2266/07, que rezonifica el predio de Estados Unidos y Loria como Urbanización Parque, el Gobierno de la Ciudad quiere instalar oficinas públicas de la futura sede comunal en el edificio de la plaza. Nos oponemos a la contaminación del espacio verde por el que tanto luchamos los vecinos de Boedo.


Quienes colectaban el valioso material no debían hacerse rogar para lograr la firma de los transeúntes de la zona central de Boedo y sus adyacencias. Bastó con esbozar el tema para lograr la adhesión inmediata. Una curiosidad que casi obra como encuesta al paso con enorme superioridad de número sobre las que suele realizar TN: la respuesta con más rating ante nuestra solicitud: “¿es contra Macri? ¿Dónde firmo?”•








Wikiliando
Por Leonardo Busquet


En los tenebrosos años de la guerra fría, el patio trasero de los EEUU fue un banco de pruebas de todos los modelos represivos. Primero llegaban los tanques y los marines de la mano de la Doctrina de la Seguridad Nacional elaborada en el núcleo duro del Pentágono. La iniciativa intervencionista gozaba del aporte societario de los gobiernos autoritarios de la región. Inmediatamente llegaba el modelo económico a implementar. 
Otros escenarios en el mundo eran acosados por guerras inventadas que más tarde o antes, posibilitaban desarrollar el pingüe negocio del tráfico de armas que lidera el país del norte.
Pasó mucha agua bajo el puente. Y mucha sangre. Hoy la cosa se baraja de otra forma. Sin desdeñar, claro está, los moldes tradicionales. El imperio de la globalización tecnológica impone otros recursos, más sofisticados, menos sangrientos (en apariencia) y mucho más sutiles. La CIA es especialista en estos menesteres. Y también en vender buzones y operaciones de prensa de baja estofa que suelen ser compradas por los disciplinados miserables desinformadores vernáculos. Y sin chistar que el suculento sobre con el cheque siempre llega a tiempo. Ahora nos desayunamos con que un soldadito de bajo rango, con cara de boludo, se encargó, él solito y por su cuenta, de desclasificar nada menos que 250 mil documentos reservados que la trilogía de siempre: Pentágono - CIA - Casa Blanca (en ese orden), tenía guardado bajo siete llaves, con otros misterios, que conforman parte del corpus de la inteligencia norteamericana. El paso siguiente lo desarrolló un presunto portal informativo independiente en Internet y cuyo dueño ya está en cana en nombre de la sagrada libertad de expresión que usa a su antojo el imperio del norte. El portal en cuestión desparramó por el mundo la preciosa información y desnudó un escándalo de proporciones que, inflado a la medida de las necesidades, puede llegar a superar el watergate de Nixon con pedido de caida de Obama incluido. Lo simpático del caso es cómo se recargaron las tintas sobre los gobiernos progresistas de América Latina. Un clásico es embestir contra el indómito Chávez. Ahora se sumaron el “indio” Evo y la “bipolar” Cristina. Como se puede apreciar, ya no hacen falta doctrinas de seguridad ni planes económicos impuestos por la ortodoxia del FMI. Un simple combo informático alcanza para la precaria desestabilización regional. Lo más vergonzoso es cómo se compra el escándalo en algunos medios de nuestro país. La precaria oposición política que, con sus intereses subalternos a flor de piel, ejercen los multimedios concentrados, tratan de convencer sobre la seriedad del problema en cuestión. Y la gilada del medio pelo tilingo compra y compra, no deja de comprar. Siga el corso. Eche 20 centavos en la ranura si quiere ver la vida color de rosa, dice el enorme poeta. En medio del caos desinformativo, de la tinellización, de las decadentes Mirtha y Susana y de cierta clase política turra e ignorante, es bueno volver la mirada sobre ese párrafo que Ernesto Sábato escribió en la introducción de su ensayo La Resistencia: A cada hora el poder del mundo se concentra y se globaliza..., continentes en la miseria junto a altos niveles tecnológicos, posibilidades de vida asombrosas a la par de millones de hombres desocupados, sin hogar, sin asistencia médica, sin educación. La masificación ha hecho estragos..., esta crisis no es la crisis del sistema capitalista como muchos imaginan; es la crisis de toda una concepción del mundo y de la vida basada en la idolatría de la técnica y en la explotación del hombre. Para la obtención del dinero han sido válidos todos los medios..., esto parece la estampida que sigue a un terremoto donde en medio del caos cada uno saquea lo que puede”.•










Barriólogos
Por Angel O. Prignano


Homenaje permanente a los barriólogos porteños: un acto de agradecimiento


Uno de los peores defectos del ser humano es ser desagradecido. No nos acostumbramos a admitir que otros nos hayan ayudado, diría que muchas veces negamos los favores recibidos, como si nada hubiéramos aprendido de nadie. Pareciera que deseamos desesperadamente ser originales y hasta refunfuñamos: ¡qué bronca, esta idea se le ocurrió a este tipo antes que a mí!. Nos cuesta aceptar lo que hacen los demás. Y más nos cuesta admitir que los demás nos enseñan, que nos ayudan a interpretar las cosas, que pueden señalarnos un camino... porque nos las sabemos todas. Entonces se omite la cita, se desdeña el reconocimiento, en definitiva no se agradece. Por supuesto que no siempre es así, aunque se podría caminar algunos kilómetros más en aquella dirección.


La idea de recordar y homenajear a los historiadores de los barrios porteños –los barriólogos– avanzó con rumbo contrario, pues partió del agradecimiento, precisamente. Del agradecimiento a todos ellos por la pasión de su trabajo y por habernos permitido leerlos y aprender de esa pasión. Poco o mucho, pero aprender y comprender; esencialmente lo último. Porque, mucho o poco, cada uno influyó en nosotros para que reconozcamos nuestra propia barrialidad, para que registremos el lugar en el que estamos parados, ese suelo del que hablaba Rodolfo Kusch y donde se arraiga nuestra cultura identitaria: Detrás de toda cultura está siempre el suelo... Y ese suelo así enunciado, que no es ni cosa, ni se toca, pero que pesa, es única respuesta cuando uno se hace la pregunta por la cultura. Él simboliza el margen de arraigo que toda cultura debe tener. Es por eso que uno pertenece a una cultura y recurre a ella en los momentos críticos para arraigarse y sentir que está con una parte de su ser prendida al suelo. Creo, entonces, que nunca más justo este acto de agradecimiento, pues los barriólogos trabajaron sin prisa, pero sin pausa, para hacernos comprender –reitero deliberadamente este concepto– y querer aún más ese suelo, nuestro primer hogar callejero: el barrio. 


En tal sentido, el 2 de noviembre pasado Baires Popular dejó inaugurada la Fotogalería de Barriólogos en homenaje permanente a los historiadores de los barrios de Buenos Aires. Lo hizo en la trastienda del Café Margot, donde funciona la Biblioteca Maestro Caiafa. ¿En qué otro lugar podía ser? En la ocasión fueron descubiertos los retratos de Héctor F. Arata, Antonio J. Bucich, Rómulo D. Carbia, Alberto O. Córdoba, Hugo Corradi, Vicente O. Cutolo, Diego A. del Pino, Enrique G. Herz, Jorge Larroca, Ricardo de Lafuente Machain, Rafael E. Longo, Ricardo Lovotrico, Ricardo M. Llanes, Miguel A. Malaponte, Luis J. Martín, Enrique H. Puccia, Francisco L. Romay, Manuel J. Sanguinetti y Ofelio Vecchio.


Además se recordó a otros barriólogos fallecidos que también hicieron historia: Emilio J. Vattuone, Héctor Iñigo Carrera, Miguel D. Etchebarne, José J. Maroni, Roberto C. Boracchia, Natalio J. Pisano, Elisardo López Serrot, Manuel Carlos Melo, Julio A. Luqui Lagleyze, Alfredo L. Noceti, Enrique Pereda, Enrique Bonsergent, Jorge Ochoa de Eguileor, Angel Mazzei, Elisa Casella de Calderón, Carlos T. de Pereira Lahitte, Juan A. Isetto, Antonio J. Costa, Jorge Alfonsín, Luis A. Vanasco, Félix B. Visillac, Raúl Silva Montaner, Enrique T. Romero, Miguel Pariente (h), Juan Carlos Rossi, Emilio Bitar, Oscar Himschoot, Beatriz Melogno, Rafael Berutti, Guillermo Furlong, Iván Grondona, Germinal Nogués, Andrés R. Allende, Elías Carpena, Ricardo Tarnassi, Silvestre Otazú, José M. Brignone, Juan E. Belza, Enrique de Gandía, José Pugliese, Oreste Vaggi, Andrés Millé, Feliciano Álvarez, Santos S. Luppi, Nicolás Martínez Brizuela, Rafael Berruti, Horacio J. Pando, Horacio Schiavo, Roberto Barreiro, Eduardo Pombo, José C. Astolfi, Raúl H. Roqué, Horacio A. Ayala, Fortunato Troisi (Colito), José J. Bianchi, Horacio A. Cabrera, Eduardo F. Aguilar, Enrique Pereda, José Alvarez Díaz y Carlos Pedro José Benítez.


La lista siempre será incompleta pues hay barriólogos a descubrir y otros por venir. Estos, al igual que los homenajeados, seguramente nos seguirán ayudando a afianzar nuestra barrialidad presente y futura.•










CCCP5
La nota de apoyo enviada por el Consejo Consultivo Comunal Provisorio Nº 5 - Almagro y Boedo a nuestra Asociación Vecinal para apoyar el rechazo a la licitación de construcción del CGP en el predio de la plaza.


En diciembre del 2006 se sancionaba para alegría y esperanza de los vecinos del Barrio de Boedo la Ley 2.266 que declaraba de utilidad pública el predio destinado a la futura Plaza de Boedo, afectándolo a Distrito de Zonificación UP (Urbanización Parque). 
La racionalidad y sensatez del reclamo, ya que son mínimos e insuficientes los espacios verdes en todo el Barrio de Boedo, hicieron que el interés público no tuviera oposición a la hora de aprobar esta Ley.
Sin embargo la violación de la letra y el espíritu de las leyes de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, se ha transformado en un estilo de gobierno por parte del Poder Ejecutivo local.
Ya nos hemos manifestado oportunamente en contra del único acto administrativo vinculado al proceso de descentralización hacia las Comunas, que fue el dictado de la irregular y viciada Resolución 27-SSATCIU/10, contrariando lo expresado en la Ley orgánica de Comunas 1.777.
Ahora, con la decisión del llamado a licitación pública para construir un nuevo edificio del Centro de Gestión y Participación Comunal Nº 5 en el predio destinado a la construcción de la Plaza de Boedo, una vez más persiste en desconocer la Ley.
Evidentemente el “cono de silencio” y “micro-universo VIP” en el que viven el actual Jefe de Gobierno y los funcionarios que lo acompañan les impiden no sólo conocer las leyes, sino también oír los justos reclamos de quienes, luego de una lucha de más de cinco años, creían haber obtenido el derecho universal de haber alcanzado una mínima mejora en la calidad de vida de los vecinos del Barrio de Boedo.
El CONSEJO CONSULTIVO COMUNAL PROVISORIO Nº 5 – ALMAGRO Y BOEDO, se solidariza y ADHIERE a los reclamos de la Asociación CIVIL CULTURAL AMBIENTAL TODOS POR LA PLAZA DE BOEDO.
Buenos Aires, noviembre 29 de 2010
Secretaría Administrativa: secretariaconsultivo@yahoo.com.ar


Nota de agradecimiento con que se respondió a la generosa manifestación de apoyo


Compañeros del CCCProvisorio Nº 5:
Por la presente les agradecemos la nota de apoyo a la causa “Plaza Mariano Boedo” llevada adelante, desde hace largos años de lucha, por todo el vecindario a través, fundamentalmente, de la Asociación Civil Cultural-Ambiental Todos por la Plaza de Boedo.
La topadora macrista, carente de todo límite legal, moral y ético requiere nuestros esfuerzos conjuntos para trabarle las orugas. Es hora de involucrarnos, nos espera un año que requerirá el mutuo apoyo en todas las circunstancias y ustedes han dado un gran paso para ponerlo en práctica. Los tendremos al tanto de las novedades. Y siempre están invitados a www.plazadeboedo.blogspot.com y/o www.periodicodesdeboedo.com.ar


Muchas gracias nuevamente.


Patricia Roselló (Presidente Asociación Civil Cultural-Ambiental Todos por la Plaza de Boedo). Fabián Mettler (Secretario)•














Nuestra amiga Haydée
Nuestra amiga Haydée, con la que hoy compartimos responsabilidades en Baires Popular y la Asociación de Vecinos por la Plaza, tiene una extensa carrera docente que culminó como Directora General de Educación en el Gobierno de la Ciudad. Nuestra amiga es Haydée Chiocchio de Caffarena quien decidió donar el invalorable material bibliográfico con que nutrió su periplo educativo: 900 volúmenes y documentos que coleccionó a lo largo de cuarenta años de carrera. El 26 de noviembre el Jardín de Infantes Nº 8 del D.E. VI, María Angela Schiavone de López, de Boedo 650, inauguró una biblioteca con ese material y bautizó al nuevo ámbito educativo con su nombre. El lugar queda a disposición de la Supervisión de Educación Inicial del Distrito Escolar I “B”.


Creo que parte de mi amor a la vida se lo debo a mi amor a los libros, decían los señaladores distribuidos en el emotivo acto inaugural, citando a Bioy Casares.
Nuestra felicitaciones a la amiga por todo lo hecho y la capacidad y empeño que sigue desplegando generosamente en su cotidiana labor solidaria.




















La virutera (Una Noche de tango): La Novela
Por Edgardo Lois




Quizás una de las razones para el intento de la escritura, sea el deseo, las ganas, de conservar determinados recuerdos u ocurrencias. Creo que todos llevamos dentro esa tendencia a querer guardar imágenes, esa atracción por atrapar parte de lo efímero/cotidiano por donde transita nuestra vida. De acuerdo a la conjunción de las patrias internas que nos rigen, elegimos este o aquel momento para poner a resguardo, más allá del primer registro en nuestra memoria. Hay quien atesora fotografías y a través de ellas intenta contar, rememorar, un instante, un día; hay quien graba conversaciones como soporte extra para el recuerdo; hay quien filma, hay quien resguarda vida trabajando una obra escultórica; hay quien pinta, quien observa para luego trabajar un personaje sobre un escenario de teatro; hay quien se apoya en la música para hacer su memoria. La memoria necesita de manos amigas y, en definitiva, creo que cada uno de nosotros debe saber identificar los mundos que lo forman para en ellos encontrar su herramienta personal: saber del afuera teniendo muy en cuenta a los habitantes de adentro.
Entre las varias motivaciones que reconozco para mi escritura, anoto esta intención de fotografiar, esculpir, pintar, grabar, el paisaje que por distintas razones, algunas conocidas y otras no tanto, ha despertado el interés, el enigma. Una vez ocurrido el alumbramiento del territorio, se inicia la construcción del registro, la elección de los elementos que en teoría mejor pintarán el lugar y las personas que pretendo guardar en las páginas futuras.
Llegué a La Viruta, la milonga de Palermo que cumplió quince años de vida, como trabajador. Todavía no lograba aclimatarme a las noches de tango, cuando de a poco comencé a practicar mi deporte preferido: la observación. Es así como empezó a correr la historia y la escritura de la novela: La Virutera (una noche de tango).
El primer movimiento lo hizo un personaje de ficción, la Muñeca rusa:
La Muñeca rusa dijo: Vos no salís, prohibido el paso.
El Impostor se rió.
¿Te reís?, me dejaste tirada en la calle, dijo ella mientras apoyaba con fuerza su mano izquierda sobre la barra y la derecha en el mueble donde se exhiben las bebidas. La mirada fija en los ojos del Impostor.
El Chino, uno de los barras, quedó atrapado entre la Muñeca y el Impostor; la miró a ella, giró y lo miró a él, sonrió y siguió jugando su papel de frontera.
¿Tirada en la calle?, a ver, explicame... se lo dijiste a Juan, el mozo, para que yo te escuche y te escuché, ahora otra vez, ¿cómo es que te dejé tirada en la calle?
Sí, soltera, toda la noche.
En el momento exacto en que la Muñeca rusa respondía, se dio cuenta de que Solapa apuraba los restos de una botella de chandon que había sido pagada con la moneda rusa de la Muñeca. Solapa, junto con dos amigos, había transitado la última parte de la noche haciendo hocicar dos chandones extra brut sobre sus respectivas humanidades en el extremo de la barra: los chandones habían pegado como si hubieran sido cuatro o seis.
Ella preguntó: ¿Por qué?, la botella es mía.
¿Qué pasa, percantina?, respondió Solapa con la voz casi dormida borrachera adentro.
La Muñeca rusa dijo algo en ruso, una palabra corta, afilada.
Solapa respondió en ruso para sorpresa del Impostor, que seguía fijo en el lugar; el Chino miró confundido a Solapa.
Ella descerrajó una oración en ruso, con seguridad una maldición para la totalidad de la familia de Solapa.
Una estirpe condenada, pensó el Impostor.
La Muñeca se puso triste, le cambió la cara, olvidó su soltería de la noche anterior por causa de abandono, y se miró en el espejo que hay detrás de la barra. La Muñeca rusa entre botellas y reflejos; ella, la amiga de los abrazos, las risas y los besos; ella tomando copas de champán y tragos de tinto y buen whisky. Ella mirándose en profundidad, abismada, porque profundidad de abismos había en sus ojos.
En la otra punta de la barra se amontonaban los cajones plásticos en los que moría la queja de la cafetería: golpes, pequeños estruendos, desplazamientos, equilibrios y falsos equilibrios, quietud, esperanzas, así en los cajones como en este final de noche de viernes en La Viruta, así en La Viruta como en la contemplación expectante del Killer, que hasta hace un momento saboreaba en la distancia el último café en un intento desesperado por aplacar el alcohol en la sangre, la sangre en su cabeza y su mano en el bolsillo derecho del saco.
La Viruta, desde mis primeros días, me pareció una especie de gran escenario de teatro donde una multitud de actores guiados por distintas motivaciones compone la historia de la obra:
En La Viruta se sabe de la existencia de los puntos cardinales: están a la vista. En la milonga del subsuelo también son cuatro, y de ellos depende la noche. Se los reconoce, pero a la vez, en la tierra virutera no se concibe el uso de brújula alguna.
La música sale a escena desde cuatro parlantes y desde allí funda un territorio propio.
Desde la entrada, a poco de bajar las escaleras, el visitante se encuentra con los dos primeros. Los parlantes son negros y están ajustados sobre un caño de metal que los mantiene en la altura; dicho caño, en su tránsito hacia el suelo, se introduce en una especie de mueble negro, una caja rectangular que guarda más parlantes. El mueble tiene cuatro ruedas, pero no va hacia ningún lado, ya que el conjunto está conectado al cielo de la milonga por un cable grueso. Un parlante a la derecha, sobre la recova, y uno a la izquierda, acompañando el río de mesas.
Los otros dos parlantes están ubicados cerca de la barra grande del fondo. El de la izquierda está sostenido en la altura por gran trípode metálico, siempre disimulado por dos mesas. El caño cromado lleva la música hasta las cercanías del techo. El cuarto parlante está amurado sobre la parte alta de la columna más alejada de la recova.
Los cuatro puntos cardinales apuntan a la pista; para atronar, afirmaría un simplista; para dar la oportunidad de la vida a los que al baile se animan, podría ser otra manera de ver el paisaje.
En La Viruta las brújulas no sirven, en la milonga la noche se hace, se deja hacer o se encuentra por fin en las encrucijadas. Tampoco hay registro de las horas, es sabido, los minutos del tango, los tres minutos para la fantasía, habitan la pista llevándose a los bailarines en la dirección contraria a las agujas del reloj.
Noche de tango en reversa, sin mapas, la vuelta al principio en cada nuevo abrazo: una manera de jugar a la eternidad.
Debo muchísimo a los hacedores de La Viruta: sus trabajadores, y estoy en deuda con las viruteras y los viruteros, todos ellos me presentaron un mundo, me dejaron mirar, y entonces quise fotografiar, esculpir, pintar, escribir para no olvidarme de que una vez estuvimos todos de milonga:
El Pebete Godoy atrona La Viruta con un primer tango a todo vapor. Llama, convoca a la pista.
El tango como instigador supremo en el instante preciso en que la noche llega al borde de su copa y se desborda sobre los viruteros.
Las mesas que esperaban su lugar en la penumbra, terminaron de encuadrar la pista. Nadie con vasos o botellas en el rectángulo, nadie en la hilera fronteriza que demarca la mantelería de colores: azul, bordó, amarillo, verde.
La pista es multitud; las parejas bailan, las que se agregan a la rotación salen de entre las mesas o entran al espacio fuera del tiempo a través de los corredores marcados en las cabeceras. Uno cerca del guardarropa, el otro cerca de la barra del fondo. Senderos para carretear, para ir a tomar pista.
Es la hora en la que comienza a llegar una importante cantidad de personas; llegan los que ya no toman clases, los que bailan, los que entran al tango sólo después de la medianoche; ellos, los que duermen amigos con los fantasmas.
La milonga está hambrienta, las escaleras proveen y conducen al ceremonial que al fin despierta bajo tierra.


La Viruta como parte de Buenos Aires: un refugio más en la ciudad/milonga a la que siempre se quiere volver.•










Donación a la escuela "Almafuerte"




Ante la proximidad del centenario de la Escuela Nº 8 “Almafuerte” ubicada en Maza y Salcedo, el candidato a la presidencia de San Lorenzo, Marcelo Moretti, donó a la Asociación Cooperadora los fondos necesarios para la compra de un equipo de audio.


Marcelo Moretti fue recibido por las autoridades de la Escuela Nº 8 del Distrito Escolar 6º, ubicada en el corazón de Boedo. Además del candidato a presidente y la directora del establecimiento, la profesora Claudia Ferrentino, participaron del encuentro la supervisora escolar Patricia Cambas, docentes y miembros de la Asociación Cooperadora. 


Como no podía ser de otro modo, durante la extensa charla se tocaron temas referidos a la educación y al Club San Lorenzo. El doctor Moretti comentó su proyecto de crear la escuela especializada en deportes padre Lorenzo Massa. La noticia fue bien recibida por los presentes ya que explicaron que en el barrio hacen falta vacantes todos los años. Todos coincidieron en que la educación es la mejor herramienta de inclusión social.
También se intercambiaron puntos de vista sobre cómo mejorar las relaciones entre las instituciones de la comunidad, especialmente entre la escuela y el club, ambos integrantes de la Red de Cultura de Boedo. En la escuela hay muchos alumnos que son hinchas de San Lorenzo, aseguró la directora. Este tema interesó al candidato y se comprometió a multiplicar acciones a partir de diciembre.


El acto central del encuentro fue la donación que realizó Moretti para la compra de los equipos de sonido del salón de actos. Por último Marcelo Moretti expresó: es una satisfacción poder colaborar con esta escuela y desde el año que viene vamos a invitar a los chiquitos para que participen de todas las actividades del Club, como el fútbol recreativo y otros deportes. El club debe recuperar su relación con el barrio, participar activamente en la cultura y ser el protagonista principal en Boedo.


Por último cabe destacar que la Escuela Nº 8 cumplirá en julio del año próximo sus primeros 100 años de vida significando para el barrio una de las instituciones públicas con mayor trayectoria y aporte a la comunidad.•
















VER, LEER Y ESCUCHAR
Crítica literaria, teatral y discográfica de producciones que no cuentan con el gran circuito de difusión alguna

Hai

Long Ohni
Ediciones La luna, Buenos Aires, 2010
¿Se puede hacer haiku en un idioma que no sea el japonés y escribirlo al margen del ideograma y de sus complementos, cuando, como sabemos, ellos abarcan tanto elementos poéticos como visuales? ¿Y, en un orden más habitual a nuestras discusiones, pueden legítimamente existir fueran del marco de religiosidad, sabiduría e iluminación que le prestarían ciertas escuelas budistas? Hay quienes creen que sí y no por mero diletantismo, sino porque el estudio y la frecuentación de lo oriental los ha convencido de que esa actividad es valedera también para expresar, en claves nuestras, los sentimientos que impulsan esa forma lírica en el otro extremo del mundo.
Long-Ohni es una de esas personas. Los hace, además, con visible adhesión a la normativa clásica, revestida de impersonalidad y obediente a pautas de dilución en la naturaleza, actitudes que siendo japoneses son asimismo humanas. Es una magnífica poeta y esa pátina oriental sin violencias anima una voz reconocible y cuidada, necesariamente occidental, pero a la vez dócil al ilustre magisterio invocado. (B.F.)


La misma que soy
Michou Pourtalé
Editorial Vinciguerra, Buenos Aires 2010
El misterio de la poesía reside en la variedad de las manifestaciones con que se nos presenta. No es verdad que no pueda definírsela, sino que es posible hacerlo de tantas maneras que ninguna llega a abarcarla por completo: lo retórico se opone a lo sensible, lo conceptual a lo formal, lo mínimo a lo heroico y sublime, lo subjetivo a lo preceptuado, lo fragmentario a lo omniabarcante, y con ser todas estas cosas tan distintas y contrapuestas, de ninguna de ellas cabe sustentar que no sea poética.
Michou Pourtalé ha captado bien esa imprecisión de fondo que acarrea la poesía. Y, muy en lo suyo, no quiere renunciar a nada: es romántica en los recuerdos, vanguardista en el descoyuntamiento, coloquial como las poetas de hoy y dueña, a la vez, de palabras viejas, tal como corresponde a una mujer de cultura; es rítmica en consonancia con la profesión de fe de los clásicos, es trágica al contemplar la existencia y es burlonamente melódica según conviene a la demorada delectación del Buenos Aires que desaparece con nosotros. El conjunto es una gran canción, extraña, llena de vitalidad y absolutamente reconocible para quienes hemos transitado el mismo tiempo y los mismos dilemas que la autora reconoce como propios. En efecto, todos entendemos: “Llegado el mediodía, todo es historia”.(F.S.Z.)




TERAPIA INTENSIVA
Karina Sacerdote
Ediciones Muestrario Buenos Aires, 2009
Karina Sacerdote transitó el dolor, la constelación de estar entre la vida y la muerte, el desgarro absurdo del silencio cuando el pensamiento fluye aunque no se lo pueda expresar, un laberinto. Y es este poemario el grito brutal que denuncia el estar vivo, la victoria final de resurgir, el inicio de de un sendero de valoración, de balance, de un reacomodarse después de la tempestad.
Y es así que la autora nos señala cuando la vida pende de un hilo/algunos soportan ese devenir/algunos se cuelgan para que se rompa/y otros/muy pocos/trenzan al tuyo sus propios hilos. Pareciera que hubo un allá y hay un acá a partir de la experiencia traumática y dolorosa, un acá donde se aprende a mirar, donde resurgen los verdaderos afectos. Karina celebra la existencia y deja plasmado un legado en versos y metáforas, ya no quedan sombras y solo la habita el bello resplandor, así nos dice en uno de sus poemas: estoy viva y viviré siempre amando/siete lunas llenas/ocho pies que me dan pasos/nueve soles/diez/once/doce/veinte/treinta/ochenta/lo que Dios quiera. 
Un libro para celebrar después del sufrimiento, un libro para aprender a estar vivos. (G.T.)




CAIRELES EN EL AIRE
Autores varios
Editorial Algazul Buenos Aires, 2010
Una nueva antología poética, una más y van... Pero lo que abunda es rasgo característico de lo genuino. Si tantas antologías poéticas aparecen se debe, sin duda, a que la escondida secta de los poetas experimenta una imperiosa necesidad de vida. Si lo exterior se empeña, hoy día, en negar a la poesía, ésta se aferra a su existencia y persiste en querer hacerla valer. Resulta bueno que sea así: un día las cosas cambiarán y los poetas de ese futuro, podrán ver el mundo con otros ojos.
Caireles en el aire da, al respecto, un poco más de lo habitual. La sagacidad de la selección reside, en este caso, en la heterogéneo de los estilos, en la variedad representativa de las voces. Contrariamente a lo habitual, se ha eludido aquí el encierro en una generación, en una capilla, en un taller. Coexisten en este volumen el surrealismo pasional y aporteñado de Alfredo De Cicco; la fuerza testimonial de Carmen Escalada; la provincianía lírica de José Gallardo; el coloquialismo de Cecilia Glanzmann; el desgarramiento existencial de Silvia Long-Ohni; la transparente religiosidad de Vilma Lilia Osella; el sosegado romanticismo de Marcelo Manuel Oviedo; la pureza expresiva y conceptual de Osvaldo Rossi; el atento neoclasicismo de Fernando Sánchez Zinny y el ensimismamiento filosófico del recientemente fallecido Luis María Sobrón, y ya la enumeración parece excesiva en cuanto a diversidad. Si a eso añadimos que unos cuantos de los nombrados tienen, desde hace tiermpo, acreditada presencia en la poesía argentina, se convendrá que la publicación vale la pena. (F.L.C.)








POEMA
Soneto


Te debía este soneto, Mataderos: 
Tellier, Rodó, Murguiondo, Los Corrales, 
por tus atardeceres de arrabales 
cayendo a las espaldas del Resero.

Y por cosas antiguas me debía 
mirar en este barrio como lo hago, 
te anduve cuando fue Nueva Chicago 
y el progreso en andamios se subía.

Bajo luz de mercurio es imposible 
poner nostalgia a los anocheceres 
que perdieron la paz del claroscuro.

Por estas calles se forjó a puro 
fierro el mito, leyenda hecha de ayeres, 
aunque hoy hablar de guapos sea risible. 


Rubén Derlis















CULTURA GRATUITA
Guía de actividades culturales barriales que no requieren erogación 


Mesa de publicaciones                            
“Desde Boedo” y “Baires Popular”                      
Sábados de 11 a 13.30 en la esquina de           
Boedo y San Ignacio                                   
Periódico Desde Boedo, Ediciones BP, Papeles de Boedo y otras publicaciones y ediciones barriales. Venta de material fotográfico (Boedo antiguo) restaurado por Mario Bellocchio.


Muestras de pinturas en “Los Notables”                                    
Bares Margot, Hnos. Cao, El Federal y La Poesía 
Muestra de Liliana Barrera (Pinturas), con curaduría de Carlos Caffarena en el Café Margot. En el Café “Hnos Cao” (Independencia y Matheu): Adri Jou (Pinturas) y en Café “El Federal” (Perú y Carlos Calvo) y Café “La Poesía” de Bolívar y Chile: María Cristina Joos (pinturas)


“En la biblioteca Caiafa”                               
En la trastienda del Bar Notable “Margot”,                        
Boedo y San Ignacio, Baires Popular realiza, de 18 a 20.30, una vez por bimestre, un taller literario gratuito titulado “Complete su cuento” que tiene coordinación de la licenciada en Letras Carmen Ortiz en la trastienda del Café Margot (avenida Boedo 857, esquina San Ignacio). Información e inscripción en la Mesa de Libros que funciona en la puerta del citado Café los días sábados entre las 11 y las 13 horas o al E-mail: cartiz@telecentro.com.ar 


“Vení que te cuento”.
Los segundos martes del mes, de cada bimestre, nos encontraremos con un narrador o narradora para compartir cuentos para jóvenes y adultos. 
Continuaremos con la presentación de libros y autores los últimos martes de cada mes a las 18,30. Presenta Leonardo Busquet.


Museo Monte de Piedad                                       
(Boedo 870, 2º piso por escalera)                                                  
Tel.: 4 931-8204/ 4 931-1605; Fax: 4 932-4680,                      
E-mail: museo@bancociudad.com.ar
HORARIOS DE VISITA AL MUSEO:                                                 
Lunes, miércoles y viernes de 10 a 17. Martes y jueves 10 a 20. 
VISITAS GRUPALES: concertarlas telefónicamente. 
“Buenos Aires esquina Boedo”                                                      
66º encuentro del ciclo presentado por BAIRES POPULAR 
                               
“HOMENAJE AL DÍA DEL TANGO”                                           
SEMBLANZA A CARGO DE ROSA MARÍA
A continuación actuarán
LUCRECIA MERICO - ALFREDO PITTIS (CANTO)                      
HERNAN PIREZ - LEONARDO ANDERSEN (GUITARRAS) MIRTA ALVAREZ (canto y guitarra) ELIDA CASCO - CARLOS RODRIGUEZ ROBERT (BAILE)
CONDUCCIÓN GENERAL: ROSA MARÍA SILVA
El sábado 11 de diciembre a las 16.30 hs.                                       
en el bar ESQUINA HOMERO MANZI                                             
-AV. BOEDO Y SAN JUAN - Entrada libre y gratuita
U. A. y de Gestión Pque. Avellaneda                                       


Complejo Cultural Chacra de los Remedios                             
Circuito de Espacios Culturales - Dirección General de Promoción Cultural - Subsecretaría de Cultura - Ministerio de Cultura
Segundo Encuentro de Comunicación y Medios Locales ECOMED 2010
Sábado 11 de Diciembre de 15 a 19hs. en Parque Avellaneda
Lacarra y Directorio, Playón Antiguo Tambo.
RADIO ABIERTA - FERIA DE MEDIOS - CHARLAS AL AIRE LIRE - ESPECTACULOS
Espectáculos Programados:
16hs. Muestra Taller de Clown -Caramelos-
16hs. Taller de Huerta, Drap-Art y Lecturas.
16.30hs. Muestra Taller Iniciación Actoral Adultos -El Principito.
17hs. Muestra Curso de Formación del Actor para Actuación en el Espacio Abierto. -Canto a lo Esencial.
18hs. Encuentro de Danzas Circulares del Mundo.
19hs. Muestra Taller Canto Murguero -BicenTutenario.


“La inefable señorita Chris” 
La novela póstuma de Juan Alberto Nuñez, amigo y colaborador asiduo de DESDE BOEDO, editada por la Secretaría de Cultura del Municipio, estará con nosotros en la biblioteca Domingo F. Sarmiento de la calle almirante Brown 763 de Morón, el sábado 18 de diciembre a las 17hs.