8.5.09






nº 85
Mayo de 2009




SUMARIO

La Avenida de Mayo
En el umbral del bicentenario, la avenida con más historia de todas las que trazan el inmenso damero de Buenos Aires
Mario Bellocchio

Cine en “la Balear”
Se reanudó el ciclo con el inédito videofilm “Un águila guerrera” de Mario Bellocchio

Callejeando historia
La Residencia de San Telmo, Flores y un obispo cascarrabias
Diego Ruiz


Memorias y viñetas de la ferretería vieja
El periplo de las copas
... tardaron cuarenta y un años para abrir los regalos de casamiento...
Josecito de la ferretería

Alarma: la ley de los medios
De cómo la televisión maneja el estado de ánimo de la sociedad
Silvia Valerga

El Jardín de los Poetas
Sus bustos son un homenaje al mundo de las letras no sólo argentinas sino también universales.
Miguel Ruffo

Radiodifusión: la nueva ley (II)
Los grandes pulpos mediáticos se empeñan en difundir la corporativa defensa de sus intereses disfrazándola de resguardo a la libertad de prensa.

El muro, el virus, la vergüenza y los miedos
El primer virus que nos viene demoliendo es el de la ignorancia.
Leonardo Busquet

Arenero
(¿Va a estar rota Buenos Aires?)
Horacio Cafferata

La plaza
Se estiran los plazos de ejecución. La Comisión Vecinal Todos por la Plaza organiza un encuentro el 9 de mayo para reafirmar posiciones. Una demolición que no fue y la nueva licitación que involucra toda la tarea excepto el edificio preservado
Patricia V. Roselló

Una poética del pasillo
Desde que tengo memoria, en esta ciudad de Buenos Aires, en este mientras tanto entre la conservación y la picota, sé que mi mirada es, muchas veces, convocada por los pasillos.
Edgardo Lois

POEMA
Andanza por una calle con espectros
Lysandro Z. D. Galtier


EDITORIAL
Barbijos
...el miedo, ese viejo aliado del sometimiento.
Mario Bellocchio

VER, LEER Y ESCUCHAR
Crítica literaria, teatral y discográfica de producciones que no cuentan con el gran circuito de difusión

CULTURA GRATUITA
Guía de actividades culturales barriales que no requieren erogación alguna





La Avenida de Mayo
En el umbral del bicentenario, la avenida con más historia de todas las que trazan el inmenso damero de Buenos Aires



Resulta una experiencia singular deponer las obsesiones momentáneas, transformar la visión carente de registro en una mirada aguda. Accionar el ávido espíritu crítico que tan fácilmente aflora en otros ámbitos “de viaje” donde la cotidianidad queda arrumbada. La Avenida de Mayo suele ser un buen campo para el ejercicio y el descubrimiento aparece, por más trajinada que se la tenga. Con sólo alzar la mirada basta para que la observación se transforme en hallazgo. ¿Cómo será la ciudad habitando esa cúpula? ¿Desde aquel balcón habrán visto a la Infanta Isabel, hace un siglo ya? ¿Y el bisnieto de ese observador anónimo, desde el mismo lugar, habrá sido testigo de la muerte de Benedetto(1) en la represión del 2001? ¿Qué quedó de Botana(2) entre tanta policía?. Salvado sea el regreso —en los cruces de bocacalle— al mundo del horizonte, para no arriesgar el pellejo inútilmente, la experiencia puede repetirse durante las diez cuadras del trayecto y verse interrumpida, de tanto en tanto, con aberraciones como los veintinueve pisos del monstruoso HSBC, en la esquina noroeste de Chacabuco, un aporte de la “modernidad” a la frivolidad con desequilibrio estético. ¿Será el saldo de una cuenta pendiente que dejó la avenida en su nacimiento al cercenarle un brazo al Cabildo?
Frecuentemente la contemplación de las pirámides eclipsa el “genocidio esclavo” de su construcción. Sin equilibrar tan tremendo saldo, tampoco la Avenida de Mayo puede lucir sus orígenes pretendiendo pureza.
En tiempos en que Boedo era la General Paz —desde 1880, con la federalización de Buenos Aires, Boedo ofició como límite oeste de la ciudad—, el primer intendente porteño, Torcuato de Alvear, comenzó a pergeñar la avenida. Coincidente con la europeizante generación del 80, Alvear elevó al ministro del Interior Bernardo de Irigoyen un pedido de declaración de utilidad pública y consecuente expropiación de las manzanas comprendidas entre las plazas de la Victoria (actual Plaza de Mayo) y Lorea, y entre las calles Rivadavia y Victoria (actual Hipólito Yrigoyen) para la apertura de una avenida de treinta metros de ancho denominada 25 de Mayo, ese fue el nombre en el proyecto que, aprobado por la ley 1583 del 31 de octubre de 1884, culminó con el nombre de Avenida de Mayo en homenaje al mes del primer gobierno patrio. Los comienzos fueron muy debatidos por lo oneroso de las expropiaciones y demoliciones.
Desde 1846 cuando Sarmiento había mostrado su admiración por los bulevares construidos por el prefecto Haussmann en París, nacieron proyectos similares, como el de 1872 —de los ingenieros Carlos Carranza y Daniel Soler— que imaginaban una avenida de 50 metros con el mismo recorrido. Sin embargo, éste de Alvear, generó una interminable polémica sobre la prioridad que habría que darle a la obra señalando como más necesario completar las redes de agua corriente y desagües, arreglar las calles, y terminar con los pantanos y focos de fiebre de las afueras de la ciudad. Sin embargo el gobierno impondría su criterio basado en la necesidad de enlace de la estación Once con el puerto y en la ventilación que supondría el ancho bulevar con relación a la estrechez promiscua de las antiguas callecitas céntricas. La discusión le costó a Alvear una suspensión por despilfarro, pero no pasó a mayores.
Las demoras se sucedieron en las cámaras del Congreso, donde fue toda una epopeya aprobar la ley de apertura de calles y avenidas, en Diputados. Y en el Senado, el empréstito propuesto por el intendente fogoneó un largo debate.
En 1888, el sucesor de Alvear, el médico higienista Antonio Crespo propuso derogar la ley de apertura de la arteria, pero la opinión pública le dio la espalda y torció su brazo. De manera que ese mismo año se inició la demolición de los edificios públicos más antiguos: la Casa de la Policía, los tres arcos del lado norte del Cabildo y el Cuartel de Bomberos. Y simultáneamente comenzaron a construirse los primeros edificios del proyecto triunfante: avanzar por el centro de la manzana expropiada sin apoyarse en ninguna de las paralelas laterales (Rivadavia y Victoria).
La sucesión de intendentes incluyó el retorno de Alvear, quien falleció en 1890 sin ver la construcción de su proyecto. Asumió Francisco Bollini, quien debió soportar las penurias económicas de 1890 y las no pocas que le deparó la construcción del Palacio Municipal que subsiste en la esquina de Bolívar. Su sucesor, Miguel Cané, fue quien fijó la fisonomía al establecer los límites de altura de la edificación: una máxima de 24 metros y una mínima de 20. Y el predominio estilístico atravesó las improntas que fijaban los bulevares parisinos para aceptar la más ecléctica de la Gran Vía madrileña, influenciada por la abundante corriente migratoria española. Finalmente, el 9 de julio de 1894, el intendente Federico Pinedo junto al presidente Luis Sáenz Peña cortaron las cintas que liberaron el paso de carruajes por la nueva arteria. Fuegos de artificio y arcadas conmemorativas le dieron la bienvenida al pomposo bulevar, que tardó un par de meses más para completar su circulación vial ya que la monetaria tuvo que prescindir de los catorce millones que costó la obra.

Una avenida inusual
Algunas características de la nueva vía fueron realmente innovadoras, como los túneles que bajo las veredas transportaban las cañerías de agua corriente, gas y cables. Aún existen, en ruinas por desuso, pero significaban un gran avance para la eventual reparación. Las veredas que acompañan la calzada de diecisiete metros eran de un ancho inédito para la época: seis metros y medio. Y servicios como los baños públicos bajo nivel permanecieron activos hasta bien entrado el siglo veinte (sobre la vereda de Perú al 100 aún puede observarse una escalera de acceso clausurada). El arbolado de plátanos fue, en cambio, una originalidad innecesaria que introdujo —ya se sabía entonces— una irritativa contaminación alérgica. La iluminación, en los comienzos, se hacía a través de farolas de gas y eléctricas montadas sobre columnas de bronce ubicadas en el centro de la calzada. Pero pronto cedieron posiciones al ser trasladadas a las amplias veredas.
El pavimento adoptado fue el de cubos de madera dispuestos sobre base sólida. Pero en dos años la pinotea —primera madera elegida— tuvo que ser reemplazada por el más sólido algarrobo.

Los edificios
Los primeros edificios de corte academicista respondieron a la influencia francesa. Pero bien pronto se desató una competencia de profesionales que utilizaron las nuevas técnicas de edificación y vistieron a la avenida eclécticamente sin desatender ciertos lineamientos comunes como la altura y la continuidad de los balcones.
En una enumeración no taxativa sobresalen el Palacio de Gobierno (1902) del arquitecto Buschiazzo, el edificio que ocupaba el diario “La Prensa” realizado por Charles Garnier, hoy Ministerio de Cultura del gobierno de la ciudad, lo que fue la sucursal de la tienda Gath & Chaves, en la esquina noreste de Perú, la Ciudad de Londres (que ocupaba la cuadra sur situada entre Perú y Chacabuco, y que fue destruido por un incendio en 1910), la Asociación Patriótica Española, la Sociedad Fotográfica, el Teatro de Mayo, el Hotel Frascati, el Gran Hotel España —creado en 1897—, The Windsor, el Imperial, el Metropole —del arquitecto Augusto Plou, inaugurado en 1899—, la talabartería Mataldi, el café Tortoni, el Teatro Avenida, la confitería Gaulois, el Hotel Chile etc. Muchos de ellos nacidos de la imaginación del arquitecto Alejandro Christophersen. Finalmente, las cúpulas rojas de La Inmobiliaria coronan el edificio que ocupa toda la vereda sur de la última cuadra, construido por el arquitecto Luis Broggi hacia 1910 para la compañía de seguros hoy desaparecida.
El primer transgresor de la altura edilicia máxima fue el palacio Barolo que el arquitecto italiano Mario Palanti construyó para el empresario Luis Barolo en 1923. Su estructura resume un cúmulo de alusiones a la Divina Comedia —de cuyo autor era devoto Barolo— tales como su altura, cien metros; cien son los cantos de la obra. Hoy, como edificio de oficinas, sigue conservando su magnificencia de origen, a pesar del deterioro no resuelto de algunos sectores de su estructura.
Un mundo particular era el de los hoteles. Algunos como el Metropole con comodidades superiores a sus pares de Europa. El Majestic (1910), en la esquina de Santiago del Estero, de los arquitectos Collivadino y Benedetti. El Gran Hotel España (1897), con 315 habitaciones. El Hotel Castelar, que aún existe, construido en 1928 por el arquitecto Mario Palanti. En sus comienzos fue Excelsior, pero Francisco Piccaluga, su primer dueño, quiso homenajear a Emilio Castelar y Ripoll, presidente de la Primera República Española. Fue célebre, en su subsuelo, la peña Signo, importante lugar de reunión de la intelectualidad argentina y extranjera. Su habitación 704 exhibe el honor de haber albergado a Federico García Lorca durante seis meses, entre 1933 y 1934.

El transporte
Los propietarios de los edificios solicitaron —y obtuvieron— que la avenida no fuera recorrida por tranvías. Pero en 1909 se produciría una discrepancia entre la Municipalidad y el Congreso Nacional. Este entregando una concesión al Ferrocarril del Oeste para un túnel con servicio ferroviario bajo la superficie de la avenida. Y aquel otorgando la misma concesión a la CTAA (Compañía de Tranvías Anglo Argentina).
El diferendo se zanjó satisfaciendo ambas concesiones. La de la Anglo para el subte que hoy conocemos como “A”, cuyo tramo inicial, Plaza de Mayo-Plaza Miserere, fue inaugurado el 1º de diciembre de 1913. Y la del ferrocarril, con un túnel más profundo, para servicio de carga (hoy subsiste como servicio de pasajeros entre Castelar y Puerto Madero).

Los cafés de la avenida
El Tortoni, de vieja data, tanto que su inauguración data de 1858, se trasladó a la actual ubicación en 1880 y abrió sus puertas a la avenida con el suntuoso diseño de Christophersen en 1898. Fue el primero que se atrevió con las mesas y sillas en la vereda. En el funcionó, hasta 1943, la peña Agrupación Gente de Artes y Letras, inaugurada en 1926, presidida por Benito Quinquela Martín. Por ella pasaron en polícromo desfile Einstein, García Lorca, Borges, Ortega y Gasset...
En la esquina de Bernardo de Irigoyen La Armonía distribuyó sus mesas desde 1899. La Castellana, en el cruce de Lima, se ufanaba de ser familiar en épocas en que no era bien vista la concurrencia de mujeres. En 1897 se abrió La Toja, que desde 1936 se llama Iberia, en la esquina sudeste de Salta. Durante la Guerra Civil Española fue el bastión de los republicanos. En la esquina de enfrente se encontraba el Español, que, por lo contrario, era el más importante reducto falangista. Fueron célebres las peleas a sillazos, algunas de particular gravedad, entre hermanos tan fieramente divididos por la contienda. Otro de la larga lista —la mayoría hoy desaparecidos—, el París, donde cantaron Gardel-Razzano, que quedaba en el 602; o La Cosechera, en la misma cuadra, frecuentado por escritores como Alfredo Bufano, Roberto Arlt y Conrado Nalé Roxlo; o el Avenida, en el 1493, donde se reunían los periodistas del famoso diario “Crítica”. Y algunas curiosidades como la del dueño del Colón, de la esquina de Bernardo de Irigoyen, que no servía bebidas porque detestaba el alcohol, y el Puerta del Sol, al 1100, con su oferta de señoritas. O los tres que se disputaban la prioridad de ofrecer “36 billares”.

El patrimonio
Si la riqueza estructural de la avenida ofrece abundante material para la admiración, la verdadera esencia por la que el Poder Ejecutivo la declaró Lugar Histórico Nacional —decreto 437 del año 1997— reside en su valor testimonial: más de cien años albergando los sucesos salientes de nuestra historia. Allí han dejado su huella indeleble las celebraciones patrias, los carnavales, las recepciones a los héroes y a los campeones, las asunciones presidenciales, las marchas políticas, las concentraciones por reivindicaciones sociales, las broncas y los mártires de los reclamos... Debe de ser ese el trémulo sobresalto que acude al caminante apenas se baja de la rutina y se sumerge en la contemplación: los ciento quince años de historia.
Mario Bellocchio

NOTAS:
(1) Gustavo Benedetto, uno de los cinco muertos por la represión policial, en el cruce con Chacabuco, el 20 de diciembre de 2001.
(2) Natalio Botana, legendario dueño de “Crítica”, edificio que hoy alberga a una dependencia policial.

FUENTES DE DATOS:
Schávelzon, Daniel. “Túneles de Buenos Aires, Historias, mitos y verdades del subsuelo porteño”, Sudamericana, Bs. As., 2005.
Cutolo, Vicente O., “Historia de las calles y sus nombres”, Editorial Elche, Bs. As., 1994.
Cutolo, Vicente O., “Historia de los barrios de Buenos Aires”, Editorial Elche, Bs. As., 1996.
Revista “Buenos Aires nos cuenta” n° 16, Elisa Casella de Calderón, Ediciones Turísticas, 1988.
Diego M. Zigiotto, “Las mil y una curiosidades de Buenos Aires”, Ediciones Norma, Bs. As., 2008.

FOTOS DE PORTADA (AGN):
1912: excavaciones para el subterráneo.
1960: esquina Perú (noroeste).
1922: ornatos del corso.
1918: 25 de Mayo.




Cine en “la Balear”
Se reanudó el ciclo con el inédito videofilm “Un águila guerrera” de Mario Bellocchio (1992). A la proyección asistieron más de 200 personas entre las que se destacó la presencia de parte del conjunto actoral y un nutrido grupo de escuela de adultos



En un atardecer pleno de emociones se expuso por primera vez en forma pública un programa piloto que, por diversas circunstancias, no pudo ser difundido hasta el presente. Nos acompañaron, como parte del elenco, Esteban Massari, Gabriel Rovito, Cristina Rozadilla y Pablo Bellocchio, a quienes mucho agradecemos su buena disposición. Leonardo Busquet presentó las diversas instancias donde se revivieron evocativos momentos de la realización en el back stage de María Virginia Ameztoy. Las frustraciones de aquellos años terribles de la guerra y posguerra fueron seguidos con emoción por los asistentes, entre los que se encontraba un ex combatiente y un grupo de alumnos cuyos maestros nos enviaron la nota que trascribimos:

“El viernes 24 de abril asistieron a la Casa Balear de Buenos Aires alumnos de la Escuela de Adultos y Adolescentes Nº 5 D.E. 13 y sus docentes: Paula, Silvia S., Ignacio y Silvia M. La institución educativa a la que pertenecen está ubicada en la calle Zinny 1641 en el barrio de Parque Avellaneda, lindante al Barrio Cildáñez y las villas que lo componen. El alumnado concurre en el turno noche, con el objetivo de finalizar la educación primaria. La población escolar se caracteriza por ser heterogénea, tanto desde lo generacional como desde lo social, siendo esta una cualidad propia del Area de Adultos y Adolescentes. En su mayoría provenientes de las provincias del noroeste argentino y países limítrofes, con diferentes historias de vida de frustraciones y de esperanza que buscan dentro de la escuela: un lugar, el sostén, la contención de pares y docentes, para fortalecer no sólo el aprendizaje formal, sino su autoestima, afirmando la construcción de su subjetividad, superando la decepción de una sociedad individualista y exitista que olvida, margina y excluye a los que desean hacer sentir su voz.
La proyección del programa piloto “Un águila guerrera” plasmó el costado más humano y más cruel de la guerra de Malvinas. Algunos alumnos, extranjeros y argentinos, desconocían este oscuro pasaje de nuestra historia y al volver a la escuela no lograron despegarse de una imperiosa necesidad, la de contribuir a aliviar el dolor sostenido de muchos seres desconocidos que donaron la vida en nombre de todos. Durante la semana se desarrolló una puesta en común donde surgieron los siguientes temas: la soledad, el miedo, la locura, la impotencia, la obediencia debida, el autoritarismo, el amor, la amistad, el respeto a la palabra empeñada, la espera, la desvalorización, la culpa, el remordimiento, el patriotismo, el dolor, la perdida, la estafa, la decepción, la ilusión y la desilusión, la pertenencia, el valor, el instinto de supervivencia, la esperanza, el respeto, el reconocimiento, los valores, la guerra y la paz, la vida y la muerte.
En este sentido, la propuesta reflexiva del film provocó en los espectadores gran movilización invitándolos no sólo a conocer la historia sino a sentirla a través de sus protagonistas, rescatándolos del olvido y la negación social”. Firman las profesoras Paula Groisman, Silvia Liliana Senatore y Silvia Marzano.






Callejeando historia
La Residencia de San Telmo, Flores y un obispo cascarrabias



En el callejeo del mes pasado el cronista hizo una exposición sobre su incapacidad para la ficción, explicando que los hechos y datos que relata tienen respaldo documental. Ello se debió a que más de un lector había inquirido sobre la realidad de sus afirmaciones, sobre todo a partir de su descubrimiento de tortugas en la Vuelta de Rocha que fue puesta en duda en todos los registros imaginables, al punto de que se organizó una expedición que, desde San Juan y Boedo, partió para aquellos lares. Emulos de santo Tomás, debieron hundir los dedos en la llaga para creer al cronista, dicho esto metafóricamente porque no lo hicieron en las aguas del Riachuelo, y eso que el escriba aún no había comunicado urbi et orbi su último avistaje de un pez de regulares dimensiones en los mismos parajes. Pero en fin, resulta que en ese mismo artículo del último número el cronista cometió un error, llevado seguramente por el entusiasmo y el vuelapluma, al consignar que la “Residencia” estaba situada en México y Defensa. Duro le cayeron encima, entonces, aquellos que antes cuestionaban sus dichos: vengativos y eruditos amigos (y no tan amigos) le dieron duro con un palo y duro también con una soga, refregándole en las narices que dicha Residencia se encontraba en Humberto I y Defensa, haciendo cruz con la Plaza Dorrego, exhibiéndole antiguos y amarillentos documentos y planos, haciéndole notar que dicho dato lo sabían hasta los niños de jardín de infantes.
Y bueno, sí, el cronista no tuvo otro remedio que reconocer que estaban en lo cierto y que tan imperdonable error se debió en parte a su entusiasmo al recorrer las calles de la vieja Buenos Aires acompañando a las columnas inglesas que, por el lado Sur, intentaban tomar el Fuerte durante la Segunda Invasión Inglesa. Pero, también, el yerro tuvo su origen en que el Hospital del Rey —desde los tiempos de Garay hasta 1795— estuvo emplazado en México y Defensa bajo el cuidado de los padres bethlemitas que en esa fecha se mudaron a la susodicha Residencia. Digamos que la Orden de los Hermanos de Nuestra Señora de Bethlehem había sido fundada en Guatemala, en 1656, por san Pedro de San José Betancur con el fin de servir a los pobres y se dedicó a establecer hospitales en todo el territorio hispanoamericano. Estos padres usaban un hábito pardo, cinturón y capa negros, sandalias y se dejaban crecer la barba por lo que también eran conocidos como los “padres barbones”, nombre con que aparece en antiguos planos su “chácara” que abarcaba los terrenos del viejo Arsenal de la calle Pichincha y hoy contienen al Hospital Garrahan y la plaza Vuelta de Obligado, en Parque Patricios.
Lo cierto es que la Residencia, originalmente, había sido una fundación de los jesuitas: allá por 1734 el vecino Ignacio Bustillo y Zevallos promovió la fundación de una casa de la Compañía en ese alejado paraje conocido como “Alto de San Pedro”, paradero de carretas y vecino al puerto de aquel entonces, para que los vecinos recibieran asistencia religiosa pues la zona quedaba aislada en época de lluvias por el desborde del arroyo que corría (y corre aún, entubado) bajo la calle Chile, el Tercero del Sur o Zanjón de Granados. El obispo Arregui autorizó entonces el alquiler de una casa donde se alojaron los padres y se dispuso una capilla, pero la autorización real se demoró hasta 1748 comenzándose entonces la construcción de una iglesia y una Casa de Ejercicios anexa en el terreno donado por el citado Zevallos, conjunto que empezó a ser denominado “la Residencia”, como lo eran todas las fundaciones jesuíticas similares. El diseño y construcción del templo estuvo a cargo —¡cuando no!— de los padres Andrés Bianchi, Juan Bautista Prímoli y José Schmidt. Y decimos “cuándo no” porque estos religiosos dejaron su huella a lo largo y lo ancho de todo nuestro territorio con obras que, por suerte, perduran en muchos casos.
Pero, siempre hay un pero, en 1767 los borbones decidieron expulsar a la Compañía de Jesús de todos sus dominios por considerarla un “Estado dentro del Estado” y, como decíamos, los padres Bethlemitas se hicieron cargo de la iglesia y los edificios anexos atendiendo el hospital —en el que fueron recibidos los heridos ingleses— hasta 1821, fecha en que coincidentemente se produjo la reforma religiosa de Rivadavia, que enajenó los bienes de todas las órdenes religiosas, y la propia Orden fue disuelta para resurgir recién a fines del siglo XX. Ahora bien, en 1806 los vecinos volvieron a solicitar la creación de una parroquia para no depender de la Concepción, por los mismos motivos invocados 70 años antes, y el obispo Benito de Lué y Riega creó el curato —luego parroquia—, de san Pedro González Telmo, advocación que curiosamente había tenido antes el primitivo convento de los dominicos. Ocurre que el beato, pues aún no es santo, era protector de las gentes de mar y era costumbre dar su nombre a las fundaciones realizadas en ciudades portuarias como la nuestra. Ese mismo año, el obispo Lué también autorizaba la erección de una capilla dedicada a san José en un terreno donado por Ramón Flores, por lo que los porteños le debemos el nombre de dos históricos barrios. Por esas cosas del destino, don Benito ha quedado en los libros de historia como el malo de la película, pues le tocó participar en el Cabildo Abierto del 22 de mayo de 1810 y su intervención fue totalmente opuesta a la de los revolucionarios, por lo que Vicente Fidel López lo recontraescrachó, junto al fiscal Villota, en su libro La gran semana de Mayo, escrito en base a los testimonios de su padre, el testigo y protagonista Vicente López y Planes. La verdad es que ni el obispo Lué ni Villota eran tan lelos como los presenta López, que como historiador era bastante energúmeno y atacaba sin piedad ni medida a todo personaje que no comulgara con su visión del papel histórico y hegemónico de Buenos Aires al punto de calificar a Artigas, Estanislao López, Francisco Ramírez y otros protagonistas de la época como “fascinerosos”, “delincuentes” y otras lindezas por el estilo. Tanto Lué como Villota hicieron sendos discursos en contra de la autodeterminación de Buenos Aires ante la prisión de Fernando VII basados en jurisprudencia que defendía el derecho divino de los reyes, contra la corriente entonces en boga y defendida por Paso y Castelli de lo que hoy llamaríamos “derechos de los pueblos”. Lo que sí es cierto es que el buen obispo tenía un carácter bastante fuerte y la Primera Junta, en una medida muy sabia, apenas asumida lo puso arriba de un barco junto a Cisneros, Villota y otros funcionarios y lo mandó a España con viento fresco, ahorrándose muchos disgustos como los que tendría en breve con el héroe de las Invasiones, Santiago de Liniers.
Así pues la iglesia que todos llamamos “de San Telmo” y que recién fue concluida en 1874 se llama, en realidad, de Nuestra Señora de Belén, llevando la advocación del beato sevillano la parroquia, hoy barrio. Y la Residencia —queda dicho ahora correctamente— estaba a su vera, en el predio que luego fue la cárcel de mujeres del Buen Pastor y hoy alberga al Museo Penitenciario. Allí fueron curados los soldados ingleses de ambas invasiones y allí llegó más tarde, en agradecimiento, un hermoso reloj donado por el regimiento 71º que comandara Dennis Pack, el coronel al que hemos seguido en sus andanzas rioplatenses y cuya rendición en Santo Domingo fuera presenciada, como se ha dicho, por un mayor de Patricios vecino del templo, Manuel Belgrano. Pero ese callejeo, postergado por esta aclaración, será en el próximo número.
Diego Ruiz




Memorias y viñetas de la ferretería vieja
El periplo de las copas

Mariposas de bronce, pitones abiertos, tornillos sin fin... Desde la cuesta del tiempo percibo la reserva de metáforas ensortijadas de la ferretería vieja. No es necesario repetirlo, toda escritura es autobiográfica, ya lo han dicho grandes y pequeños escritores. Josecito nació en el fondo de la ferretería, lo confesó en la cola del kerosene, la primera de estas viñetas. Aquí no se trata de biografía, se trata de memoria, de reanimar mundos de objetos cotidianos, de remontar arterias hasta descubrir las fuentes que siguen bombeando sangre. De pronunciar palabras que vuelven acarreando sonidos de hachuelas, fratachos o cucharas de albañil, palabras que vuelan trayendo formas de gubias, formones o garlopas. La biografía es personal, la memoria es mucho más: es historia compartida, repartida, fragmentada, en cochecitos de carrera, zaguanes en beso, aulas en erupción.
La nota de remito era extensa, clavos sin cabeza, martillos con uña, bocallaves ciegos...; databa del veinticuatro de agosto de 1973, envolvía una copa de cristal tallada, había para vino, agua, licores, postre, champagne... Estábamos con Ester el catorce de abril del año 2009 abriendo nuestros regalos de casamiento, pertenecemos a la rara especie de animales prehistóricos casados entre las explosiones de 1968 que ha logrado atravesar el milenio; separaciones afectivas o desapariciones criminales fueron raleando la tropa. Esta historia ocurrida el mes pasado es nuestra, es vuestra, es memoria en copas de cristal, nos sorprendió el interés de los amigos al escucharla, me enteré luego que Jorge la contó en la radio, Mario me pidió que haga una nota para “Desde Boedo”, dale, Josecito, hacenos otra viñeta.
Hoy, cuatro de mayo del 2009, acabo de volver de mi último viaje al país y al barrio, desde afuera qué bacán, vos sí que la hiciste bien, para qué querés más de tres meses en este país, desde adentro el teatro es otro, espectáculo sin cortinados, la vida no es como el teatro, ella no admite ensayos. Nunca aprendí a boxear, voy esquivando golpes como puedo, ahora en Epinay Sur Orge, escribiendo esta nota, aliviando nostalgias, una manera de estar allí y de ser aquí, o viceversa, la edición cierra mañana. “¿Y la aneda?”, ¿a vos te parece que te vamos a creer porque sí, porque vivís en París?, acá en el boliche se han contado bolazos que ni entran en el Gasómetro. ¿Cómo carajo podés explicar que tardaron cuarenta y un años para abrir los regalos de casamiento?
No hubo luna de miel, luego del registro civil y de un pequeño brindis del cual no quedan fotos nos instalamos en una casita en Caseros, dejamos los regalos quebradizos (juegos de copas, de té, de platos...) en el sótano de la ferretería, la que ya conocen, Boedo 1561 entre Inclan y Garay. Las razones y pormenores de esta decisión serán relatados en otra ocasión, todo se había tornado quebradizo, la época, los ideales, las cabezas... Comenzó entonces el periplo de las copas, que se salven ellas nos dijimos. En 1976 por razones que son de orden público nos fueron, algo habíamos hecho, habíamos soñado un país un poco menos cremoso para los ricos y un poco más justo para los pobres; subersivos con agravante, usábamos melena larga y poemas en el ojal. Las copas vírgenes quedaron aguardando bebidas y labios amantes en el oscuro fondo del sótano. Cuando murió la ferretería fueron trasladadas a la casona de mi hermana en la calle Colombres, luego a Caballito, al palacio de invierno de mi amigo Carlos Panzas.

Fue él quien me las entregó el mes pasado (acabo de comprar un departamento en la calle Garay); las desenvolvimos lentamente, les dimos el primer baño y emprendimos viaje, ella, yo y las copas, hasta la médula del brindis...
Josecito de la ferretería

PC (pequeño consejo): para brindar agreguen briznas de memoria en la copa, aunque siempre falte una burbuja para la plenitud del champagne.




Alarma: la ley de los medios
De cómo la televisión maneja el estado de ánimo de la sociedad
Cuando la sociedad vivía en un clima de inseguridad asfixiante por los robos y asesinatos que los medios audiovisuales transmitían con especial énfasis, desde la mañana hasta la noche y en todos los canales y radios del sistema privado de comunicación vigente, la noticia de la muerte de Raúl Alfonsín hizo girar la agenda informativa a tal punto que desaparecieron por tres días los hechos de violencia y la gente se olvidó de reclamar mano dura y pena de muerte, para dedicarse al recogimiento, hasta las lágrimas, por la muerte del ex presidente a quien muchos ya no recordaban y a quien su partido había desplazado de los cargos pero que con su deceso, los medios hicieron brotar en la población afecto y admiración, asombrando a todo el país con el multitudinario entierro.
Al día siguiente el partido radical revivió en la escena política, apareció Raúl Alfonsín (hijo), a quien pocos conocían, como un nuevo referente por encina de los punteros ya conocidos, superando incluso al revalorizado vicepresidente Cobos. En tanto el país parecía seguro porque los medios no reiteraban hasta el hartazgo los casos policiales, el tema político comenzaba a decaer como noticia porque la gente percibía un oportunismo político armado en función de un duelo. Fue, precisamente en ese momento, con el brote del dengue que los argentinos volvimos a “salvarnos” de los robos y asesinatos para entrar en un nuevo clima de miedo ante la inminente expansión de las plagas del mosquito vector, que nos hizo vaciar las góndolas de repelentes y aerosoles para insectos, imponiéndolo además, como tema excluyente en toda conversación.
Mientras en los correos electrónicos aparecían las denuncias contra Monsanto, el fabricante del glifosato utilizado en los campos donde se cultiva la soja, como responsable por la destrucción de la fauna que actúa de control natural de los insectos, denuncias que no llegaron a trascender en los medios, y una vez que la población había consumido todos los productos que había en la plaza para la protección contra el dengue, apareció un nuevo alerta internacional: la pandemia de la gripe porcina.
Ante este nuevo cuadro de situación, el pánico azota al mundo y los barbijos se agotan en las farmacias, al igual que las vacunas antigripales y las consultas a los médicos. El tema es excluyente y la paranoia provocada por el posible contagio invade la sociedad, todo por obra y gracia de la comunicación. Las cámaras de televisión fueron a buscar al “paciente cero de la gripe porcina”, según lo señalaron en Estados Unidos. Es un niño de cinco años que vive en un pueblito de 3.000 habitantes llamado La Gloria, en Veracruz, México. Los noteros le fueron a preguntar por qué estaba vivo y después preguntaron a las madres de los niños muertos qué pensaban de Edgar, el “niño cero” que estaba vivo y de sus padres. Y en la Argentina, “el país más inseguro del mundo” por culpa de los jóvenes, del paco, de los jueces y del gobierno, sólo pasamos a preocuparnos por nuestra salud.
Alguna vez se tomó como ejemplo el pensamiento de Thomas Jefferson, aquel presidente estadounidense que para garantizar la libertad de expresión prefería la prensa sin gobierno antes que un gobierno sin prensa. Pero 200 años después la prensa es apenas un apéndice de la entramada mediática dedicada al comercio que actúa con o sin escrúpulos, amparados en aquella libertad de expresión.
En la última década, mientras en Europa los medios cubren con frivolidad la vida privada de los famosos, en Estados Unidos, supuesta cuna indiscutible de la prensa libre, los medios practican la autocensura convencidos de que el pueblo norteamericano sólo tiene que ocuparse del consumo y en el Sur la pobreza se transforma en la gran enemiga de la sociedad, que en su posición de audiencia fiel de los medios electrónicos actúa tocada en sus instintos y desplaza de manera inconsciente todos los mecanismos de razonamiento que se suponen son esenciales en el comportamiento humano.
Silvia Valerga




El Jardín de los Poetas
En Génesis I Dios crea al mundo por medio de la palabra. En Génesis 2 Adán, dotado de la capacidad de hablar provee nombres a cada especie vegetal o animal que Yahveh llevase delante de él. En el Evangelio según San Juan leemos que “En el principio existía la palabra y la palabra estaba con Dios y la palabra era Dios. Ella estaba en el principio con Dios. Todo se hizo por ella y sin ella no se hizo nada de cuanto existe”. Esto en cuanto a las tradiciones testamentarias. Para Platón, el poeta era arrebatado por la musa que lo inspiraba y en un estado alterado de conciencia, como podía ser un delirio, creaba sus versos. Platón excluye a los poetas de su “República” porque banalizaban a los dioses. Aristóteles recupera la virtud de la poesía al señalar que esta “es una cosa más filosófica y elevada que la Historia, pues la Poesía aspira a expresar lo universal, la Historia lo particular”. Esto en cuanto a la tradición clásica. Dante, quizás el más grande de todos los poetas, inspirado por su amada Beatrice y guiado por Virgilio, produce la “Divina Comedia”, cuyos versos constituyen un extraordinario compendio de la sociedad medieval, la filosofía aristotélica y la religión cristiana. Las palabras y el lenguaje son fundamento de la condición humana, porque sin ellos no sería posible la comunicación entre los hombres. Esto en cuanto a la cultura occidental. Valgan estas breves y deshilvanadas reflexiones en torno a la palabra y el lenguaje para referirnos al Jardín de los Poetas en el Rosedal de Palermo.
Desde la antigüedad grecolatina —leemos en las carteleras de los atriles del Paseo— se han ubicado esculturas ornamentales en los jardines privados y públicos para producir sensaciones de armonía, equilibrio o belleza sensibilizando el espíritu. Esta idea se asocia al romanticismo y al amor. El entorno natural acompaña completando la metamorfosis de la palabra escrita y la manifestación escultórica. Ventiun escritores y un músico (Julián Aguirre) conviven bajo la arboleda. Los bustos emplazados en diversas épocas no observan una tipología uniforme en tamaños o estilos, quizás el propio desorden de formas, basamentos y ubicaciones esté a tono con la variedad infinita del lenguaje artístico.
En este Jardín de las Rosas o jardín consagrado al cultivo de las rosas (tal lo que quiere decir Rosaleda o Rosedal) creado el 24 de noviembre de 1914 durante el gobierno municipal de Joaquín S. Anchorena, cuando Benito Carrasco se desempeñaba como director de Paseos, encontramos actualmente entre otros los bustos de Miguel Hernández, Fernán Félix de Amador, William Shakespeare, Miguel Ángel Asturias, Federico García Lorca, Paul Groussac, Jorge Luis Borges, José Martí, Miguel de Cervantes, Antonio Machado, Alejandro Casona, Alfonsina Storni, Alfonso Reyes, Benito Pérez Galdós.
Sus bustos son un homenaje al mundo de las letras no sólo argentinas sino también universales. Frente a cada uno de estos bustos y acompañados por el murmullo del agua de las fuentes, el color y el aroma de las rosas y si están presentes la suavidad de los rayos solares y la refrescante brisa del otoño o la primavera podemos recordar las letras que nos legaron cada uno de estos maestros de la palabra. Cómo olvidar las andanzas de Don Quijote de la Mancha y su fiel escudero Sancho Panza, su sed de justicia y sus recuerdos de aquella Santa Edad donde todas las cosas eran comunes. O la tragedia de Hamlet cuando la sombra del rey se le aparece a su hijo, el príncipe, revelándole que ha sido arteramente asesinado, en un complot del que su esposa formaba parte y clamando por el restablecimiento de la justicia en el reino. “Yo —dice la Sombra—, cuyo amor para ella fue tan puro..., yo, siempre tan fiel a los solemnes juramentos que en nuestro desposorio le hice, yo fui aborrecido y se rindió a aquel miserable, cuyas prendas eran en verdad harto inferiores a las mías”. O los cuentos y poesías de Jorge Luis Borges con sus incursiones por las filosofías orientales, el mundo orillero de Buenos Aires, Palermo Viejo y la Parroquia de Balvanera, o recordar en “El Aleph” “el lugar donde están, sin confundirse, todos los lugares del orbe, vistos desde todos los ángulos ¿Existe el Aleph en lo íntimo de una piedra? ¿Lo he visto cuando vi todas las cosas y lo he olvidado? Nuestra mente es porosa para el olvido; yo mismo estoy falseando y perdiendo, bajo la trágica erosión de los años, los rasgos de Beatriz” . O la fuerza poética de Antonio Machado cuando dice: Caminante, son tus huellas / el camino nada más; / caminante no hay camino, / se hace camino al andar. / Al andar se hace camino, / y al volver la vista atrás / se ve la senda que nunca / se ha de volver a pisar. / Caminante no hay camino, / sino estelas en la mar. ¿Pero como conciliar estos versos con las palabras de Jesús cuando en el Evangelio según San Juan dice “Yo soy el camino, la verdad y la vida”? Será cuestión de seguir recorriendo el Jardín de los Poetas y sumergirnos en el poder maravilloso de la palabra.
Miguel Ruffo




Radiodifusión: la nueva ley (II)
Que los nuevos términos no los impongan los monopolios.
Los grandes pulpos mediáticos se empeñan en difundir la corporativa defensa de sus intereses disfrazándola de resguardo a la libertad de prensa.


Continuamos con esta serie para dar difusión y presentar al debate público la propuesta del Gobierno Nacional.
Para sumar comentarios y realizar preguntas y consultas: proyectodeley@comfer.gov.ar

LEY VIGENTE: Decreto-Ley de la Dictadura Ley 22.285/1980, actualmente vigente
PROYECTO: Proyecto de Ley de la democracia de Servicios de Comunicación Audiovisual

OBJETO DE LA REGULACION
LEY VIGENTE: Unicamente se regulan los servicios abiertos (radio y TV) y los sistemas complementarios más antiguos, como antenas comunitarias. La regulación es tan antigua que se considera a las radios FM como “Nuevas Tecnologías”.
PROYECTO: El objeto de la iniciativa es otorgar marco legal a todos los servicios de comunicación audiovisual independientemente del soporte técnico utilizado para su transmisión. El libre acceso a las nuevas tecnologías permitirá el establecimiento de garantías destinadas a proteger el pluralismo y la diversidad de todas las producciones audiovisuales.

LIBERTAD DE EXPRESION
LEY VIGENTE: Está limitada por las necesidades de la seguridad nacional. La ley actual admite restricciones a la libertad de expresión basadas en este motivo.
PROYECTO: Se garantiza el derecho humano universal al derecho a la información y a la libertad de expresión como lo prevé el art. 13º de la Convención Americana sobre Derechos humanos, que implica el derecho a recibir, difundir e investigar informaciones y opiniones.

AUTORIDAD DE APLICACION
LEY VIGENTE: El organismo que regula la Radio y la TV está integrado por por militares, servicios de inteligencia y empresarios.
PROYECTO: El organismo que regulará los Servicios de Comunicación Audiovisual será dirigido por un órgano colegiado integrado por representantes de la Legislatura nacional, de la segunda y tercera minoría y representantes del Poder Ejecutivo Nacional. Se establecerá un Consejo Multisectorial y Participativo integrado por representantes de las Universidades, de las Asociaciones sin fines de lucro, de los trabajadores del sector, etc.
PROTECCION AL TRABAJO ARGENTINO Y LOCAL
LEY VIGENTE: No se protege el trabajo argentino ni se alienta la producción local.
PROYECTO: Se garantizará y protegerá el trabajo local y argentino mediante cuotas de pantalla de cine nacional. Se exigirá el 70% de producción nacional en las radios y el 60% en la TV.

LICENCIATARIOS
LEY VIGENTE: La radiodifusión sólo se podía ejercer como actividad con fines de lucro. Las modificaciones operadas durante la década de los 90 facilitaron la concentración horizontal por vía de la admisión de los multimedios y la aparición de holdings. Recién en el año 2005 el Congreso Nacional permitió a las personas jurídicas sin fines de lucro ser titulares de licencias de radiodifusión, pero con algunas restricciones.
PROYECTO: Se permitirá el acceso a las entidades sin fines de lucro. Se reservará con carácter inderogable, el 33% del espectro para las personas jurídicas sin fines de lucro tales como asociaciones, fundaciones, mutuales, etc.

MONOPOLIOS Y OLIGOPOLIOS
LEY VIGENTE: Se admiten los monopolios y los oligopolios de medios. El Estado tiene una participación subsidiaria, ya que solo puede dar servicio en áreas geográficas no rentables para los privados.
PROYECTO: Se impedirá la formación de monopolios y oligopolios.
Se promoverá el pluralismo del espectro y de los servicios de Comunicación Audiovisual. El Estado Nacional, las Provincias, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, y los Municipios tendrán asignadas frecuencias.

PRODUCCION DE CONTENIDOS EDUCATIVOS E INFANTILES
LEY VIGENTE: No se fomenta la producción de contenidos educativos o infantiles
PROYECTO: Se fomentará la producción de contenidos educativos e infantiles.
Se establecerá un Consejo Asesor sobre Audiovisual e Infancia para garantizar el cumplimiento de estos objetivos.

CALIDAD DE LA INFORMACION
LEY VIGENTE: Se establecen límites a la calidad de la información a difundir, la que debe ser, según se acota, veraz, objetiva y oportuna. Estos límites han sido utilizados para restringir la Libertad de Expresión. PROYECTO: Se promoverá la polifonía de informaciones y opiniones en concordancia con lo establecido en los pactos de Derechos Humanos.

MEDIOS PUBLICOS
LEY VIGENTE: Solo se prevé su condición subsidiaria. Las Universidades deben ser titulares de licencias por explotación comercial en TV. Solo se preveía a ATC como empresa comercial.
PROYECTO: Se permitirá que las Universidades tengan emisoras sin restricciones ni obligación de ser sociedades comerciales. Se propondrá un sistema de medios estatales con objetivos democráticos, con participación y control comunitario y social.

PARTICIPACION PARLAMENTARIA
LEY VIGENTE: No está prevista la participación del Congreso de la Nación, dado que se trata de una ley de un gobierno “de facto”.
PROYECTO: Se dará participación al Congreso de la Nación, y su intervención será obligatoria en la conformación de la autoridad de aplicación, la elección de las autoridades de los medios públicos y la elección del Defensor del Pueblo. Se dará participación y representación a la segunda y tercer minoría parlamentaria.

CONTROL PARLAMENTARIO
LEY VIGENTE: No está previsto ningún control por parte del Congreso de la Nación.
PROYECTO: El control del Congreso de la Nación está previsto para evaluar el funcionamiento de la autoridad de aplicación, de los medios públicos y el desempeño del Defensor del Pueblo.
Para ello se crea la Comisión Bicameral de Seguimiento y Promoción de los Servicios de Comunicación Audiovisual.

AUDIENCIAS PUBLICAS Y ELABORACION PARTICIPADA DE NORMAS
LEY VIGENTE: No están previstas.
PROYECTO: Está previsto el mecanismo de audiencias públicas para determinar prórrogas de licencias y decisiones sobre el uso que se dará a las nuevas tecnologías, por ejemplo, el destino del dividendo digital.

MULTIPLICIDAD DE LICENCIAS EN SERVICIOS ABIERTOS
LEY VIGENTE: Permite que una sola persona sea titular de 24 licencias de servicios abiertos (radio y TV).
PROYECTO: Sólo se podrán tener 10 licencias de servicios abiertos.




(Continuará en el próximo número)




El muro, el virus, la vergüenza y los miedos
“Hay dos cosas infinitas: el universo y la estupidez humana. Y del universo no estoy seguro.” Albert Einstein

Todo parece confundirse como en un impúdico mercado persa o como se mezclan las porquerías en el cambalache discepoliano. El primer virus que nos viene demoliendo es el de la ignorancia.
Cuando se levanta un muro es porque no se quiere ver más allá.
Entre el intendente de San Isidro, Gustavo Posse, y el de San Fernando, Osvaldo Amieiro, se generó hace poco una increíble polémica sobre hechos casi consumados e inconsultos. Como se sabe, la administración Posse intentó, del día a la noche, levantar un indigno paredón que de inmediato tuvo un previsible impacto social negativo, enriquecido por ciertos miserables silencios. Se denunció de inmediato la división, el aislamiento y el quiebre de la solidaridad entre vecinos; discriminación, acentuación de la desigualdad y falta de inclusión social y cultural. El muro se intentó levantar sobre la excusa del problema de la inseguridad que afecta a cierta clase social pacata, tilinga y amorfa, de cacerola fácil. Algunos creen reconocer en ellos a los nuevos ricos. La línea argumental de Posse no le pertenece, la autoría bien puede ser del no ingeniero Blumberg o del ubicuo rabino Bergman. Monseñor Casaretto no abrió la boca y el cardenal Bergoglio dijo no estar informado. Entretanto el muro intentó erigirse como el símbolo paradigmático de la vergüenza y la hipocresía. Entonces actuaron los vecinos agredidos. Derrumbaron la incipiente obra, protestaron y se negaron a la separación. De inmediato intervino el gobierno bonaerense. El ministro Stornelli dijo que era una maniobra electoral y prometió que jamás se levantará otro muro. La Justicia también intervino y dictó una medida cautelar ante el pedido del municipio de San Fernando. Por su parte, el Foro de Vecinos de la zona aseguró que jamás fue consultado, rechazó enfáticamente la medida y hasta denunció la danza de proyectos inmobiliarios. Es cierto, cuando se intenta levantar un muro es porque no se quiere ver más allá. ¿Cuánto muros nos quedan por derribar? Y ¿cuántos muros habrá que alzar para combatir la pobreza, la falta de oportunidades, la ignorancia, la desinformación y la desmemoria? Y no podemos olvidarnos de la insolidaridad, la falta de educación y la estupidez humana. “Tráiganme todas las manos…” reclamó el poeta Nicolás Guillén.



Un cacho de historia
El presidente Nicolás Avellaneda (1874 -1880), enfrentó, entre otros conflictos, lo que se denominó “el problema del indio” y por medio de su ministro de Guerra, Adolfo Alsina puso en marcha un plan de avance sobre las líneas de frontera acosadas por los malones. Asentó fuertes y fortines en zonas estratégicas. El plan era dominar esas ricas tierras y entregarlas a poblaciones estables con apellidos que luego serían ilustres integrantes de la Sociedad Rural. El recientemente inventado telégrafo tuvo mucho que ver en esta estrategia. Luego de las primeras medidas, Alsina, diseñó e inició la construcción de una zanja perimetral de tres metros de profundidad para dificultar el avance de los malones e impedir el robo de ganado. La obra se completaba con otros tres metros de largo y un parapeto de un metro de alto. La zanja de Alsina se iniciaba en Bahía Blanca, pasaba por el oeste de la Sierra de la Ventana y por las lagunas Guaminí, Carhué y Trenque Lauquen hasta Laguna Amarga. Desembocaba en el río Quinto e incluía las estratégicas bases de Italó y Puán; seguía en Santa Fe por Vutaló, en Córdoba por Río Cuarto y llegaba hasta San Rafael en Mendoza. Su construcción, extremadamente costosa, fue dirigida por el ingeniero Alfredo Ebelot.
En realidad, el gobierno de Avellaneda buscaba extender la frontera desde el Río Salado hasta Río Negro para anexar tierras que posibilitaran la integración económica de la rica región, aislar a las tribus originales y presentar ante el mundo a la Argentina como un Estado unificado para incorporarse al comercio internacional. Así nació la Ley de Colonización de Avellaneda. Alsina fue reemplazado por el general Roca en el Ministerio de Guerra. Comenzaba a pergeñarse la criminal Campaña al Desierto, la “solución final” para el “problema del indio”.
Más cerca en el tiempo, cuando se inauguró el aeropuerto internacional de Ezeiza el 30 de abril de 1949, no existía una autopista que comunicara la ciudad con la flamante base aérea. El camino utilizado bordeaba el Riachuelo y a la altura de Lanús pasaba frente a una extendida villa de emergencia conocida como Villa Jardín. Curiosa coincidencia: el asentamiento que el intendente Posse pretendió aislar con un muro también se llama Villa Jardín.
En ocasión de la visita del presidente de Chile, general Carlos Ibáñez del Campo, a nuestro país en 1953, el gobierno de Perón ordenó tapar la vista de aquella villa con un largo muro. Sobre ese episodio, Bernardo Bervitzky escribió una novela y los hermanos Lucas y Lucio Demare la llevaron al cine. La película “Detrás de un largo muro” se estrenó en 1958 protagonizada por Lautaro Murúa y configuró un éxito de taquilla.
Otro muro fue levantado por la última dictadura en tiempos del Mundial 78 en Rosario. Fue un extenso tapial al este de la autopista a Buenos Aires para ocultar la villa vecina al barrio Las Flores.
La villa general Belgrano Nº 15 nació en el porteño barrio de Villa Lugano en 1937 como un asentamiento precario y transitorio poblado, originalmente, por obreros del Mercado de Hacienda y del Frigorífico Lisandro de la Torre. Dentro de esa villa aun se levanta —como mudo testigo de la vergüenza— un enorme edificio que, en tiempos del peronismo, se iba a destinar a hospital de niños. Con el golpe de 1955 la obra quedó paralizada. El imponente esqueleto es conocido en la zona como el “elefante blanco”. Fue el intendente Cacciatore quien ordenó levantar un muro perimetral para invisibilizar a los marginados. También fue en tiempos del Mundial '78. Desde ese momento al asentamiento se lo bautizó como “Ciudad Oculta”. Sus vecinos tuvieron buena suerte. Otros asentamientos y villas, como las cercanas al estadio de River, fueron barridos por las topadoras y los efectivos militares del brigadier interventor de la ciudad. También están los muros que rodean a los exclusivos countries, nacidos para el aislamiento de los pequeños grupos enriquecidos en tiempos del capitalismo salvaje del neoliberal Menem.

Hoy estamos sometidos a un nuevo capítulo del totalitarismo globalizador con un bombardeo desinformativo brutal. Una sociedad enferma no sólo por las nuevas plagas de orígenes aun dudosos, también acosada y arrinconada por multiplicidad de miedos. Otro de los peores virus es el de la manipulación informativa. La vía de expansión son algunos medios de comunicación en manos de los monopolios con intereses corporativos muy concretos. El proceso es así: se instala la violencia como forma de vida, luego viene el escándalo sensacionalista, seguidamente la confusión y el resultado es el miedo. El miedo, ya se sabe, paraliza. ¿A quiénes les conviene una sociedad paralizada?
El revulsivo quincenario “Barcelona”, en una de sus ediciones de abril publicó un título para pensar: “¿Qué mierda tienen los argentinos en la cabeza?”
Leonardo Busquet




Arenero
El pasado lunes 27 de abril, cercano el mediodía, tuvimos acceso a este silencioso proyecto –en vías de concreción– del gobierno de la ciudad: un arenero infantil en pleno centro, a metros del palacio de gobierno, en Perú al 100. Fuentes oficiosas acercaron al oído del cronista la información de que estarían prontos a llegar un tobogán y un columpio para completar el disfrute de los niños. Entre los artesanos, sin embargo, circulaba la versión de que se trataría de una triquiñuela de Macri para desalojarlos del lugar ante el fracaso de las periódicas redadas y, de paso, hacerlos quedar como “cerdos”–en tiempos de gripe porcina– si se oponen al jolgorio de los pibes. Por ahora, la carencia de vallado habla a las claras de la intención de proporcionar acceso irrestricto al nuevo emprendimiento. Aguardamos con verdadera ansiedad el corte de las cintas al cual, seguramente, por la proximidad de su despacho, concurrirá el jefe de Gobierno. (¿Va a estar rota Buenos Aires?)
Horacio Cafferata




La plaza
La plaza Mariano Boedo, nuestro lugar de encuentro, nos convoca a todos. La antigua Estación Vail, hoy recuperada para la ciudad, fue privatizada durante la dictadura, como tantos otros bienes públicos. En el año 82 Boedo se quedó sin posibilidades de tener un espacio verde, pero la lucha vecinal cambió la historia y el predio fue recuperado por la ley 2266. Desde su promulgación los vecinos venimos siguiendo los trámites expedientes y control de funcionarios para que el proyecto llegue a buen puerto. Hemos elaborado las pautas de diseño y logramos que se respeten, en el proyecto ganador, en más de un 95 por ciento.
La comisión sigue realizando reuniones con el GCABA donde se ha solicitado la recuperación de las vías de la antigua estación a modo de reconstruir la historia barrial. Asimismo, con el logro de nominar a nuestra Plaza Mariano Boedo, conseguimos que el Gobierno de la provincia de Salta, por intermedio de su Casa de la Cultura, done, para emplazar en el predio, una estatua o busto del prócer.
Este sábado, en la esquina de Carlos Calvo y Loria, a partir de las 11 hs., realizaremos el encuentro cuatrimestral de vecinos donde distribuiremos un volante que informa sobre la actualidad de los trámites: “Situación sanitaria: se ha tramitado un pedido de informes por nota cursada al CGPC5 (Nº Registro 072 del 20-04-2009).


Nombre de La plaza: “Mariano Boedo”. Aprobado por la Ley 3033. Abril 2009.


Ejecución de obras, construcción: responde el Director General de Proyectos Urbanos y Arquitectura Miguel Ortemberg: * Atraso por el fracaso de la licitación para demolición únicamente. * El dinero para la ejecución está. * Estamos en la etapa de inicio de la licitación conjunta de demolición y construcción. * La propuesta sería iniciar la obra durante el mes de mayo.* Estima el tiempo de ejecución total en 8 meses.* No incluye esta estimación el área preservada edilicia.


Averigüe ud. también sobre el estado de la licitación: http://www.buenosaires.gov.ar/areas/planeamiento_obras/licitations/web/frontend_dev.php/
http://www.buenosaires.gov.ar/areas/descentralizacion/avisos/
.


Ecomuseo participativo: hemos elaborado un proyecto que ha sido presentado a la Dir. Gral. de Planeamiento Urbano y Arquitectura, el día 21-04-2009.
Asociación Cultural Ambiental
TODOS POR LA PLAZA DE BOEDO
www.plazadeboedo.blogspot.com
ecomuseoplazadeboedo@yahoo.com.ar”


La comisión se reúne cada 15 días en el Club GON Av. Pavón 3916 para discutir todos los temas vinculados al predio de la futura plaza y la organización del espacio colectivo.
Los esperamos la próxima reunión 20 de mayo a las 19.30 hs
Patricia V. Roselló




Una poética del pasillo
Desde que tengo memoria, en esta ciudad de Buenos Aires, en este mientras tanto entre la conservación y la picota, sé que mi mirada es, muchas veces, convocada por los pasillos. Casas viejas, pasillos de casas viejas que llevan en su recorrido dos, tres o cuatro refugios de la memoria.
Camino por mi ciudad y mis ojos se quedan en las puertas angostas, casas de frentes casi inexistentes, casas con careta de poca cosa arquitectónica y, sin embargo, una extraña fascinación que quisiera descifrar me gana, me tironea la camiseta del pasado.
Hace pocos días escribí un texto que se suma a los registros que van dando forma a un nuevo libro. En este texto también aparece la mirada a los pasillos, y Pasillos es su título:

“Los gusanos avanzan la manzana.
Por fuera es roja o verde o de otros colores.
Pura fachada de manzana saludable: un brillo opaco que anuncia una historia.
Hay una crónica de los hechos: la que siempre gira alrededor, fuera de la manzana.
Sólo los gusanos sospechan los secretos de los muertos que anidan muerte al final de los pasillos.
Los gusanos avanzan la mirada a través de las puertas abiertas. Gusanos sorprendidos por corredores que ellos no trazaron. Ellos avanzan la manzana, pero no se animan a entrar; miran desde la vereda.

Robles Luis no lo puede evitar. Camina las veredas de los barrios de Boedo y San Cristóbal buscando puertas abiertas, pasillos largos que le lleven la mirada hasta el centro de la manzana. Pocas veces estuvo fruto adentro; es ahí cuando se imagina un gusano que sabe de muertos. Algo nada original a la hora de ser un gusano; era de esperar que Luis tampoco destacara como gusano. Robles Luis, casi uno más en esta Buenos Aires de 2009.”

Es cierto que hoy es más difícil encontrar puertas abiertas para adelantar la mirada como si de gusano me hubiera recibido, pero ellas siguen dando su presente, a veces ayudadas por contemporáneas rejas, y en otras ocasiones se puede pasar por ellas en el momento ínfimo de la acción de entrar y salir: robar la imagen del pasillo en un momento, algo así como ejercer la apariencia de un arte efímero. No llevo cámara, el registro va directo a la memoria, una exposición que dura segundos, un interés disimulado para no incomodar a quien, sin saberlo, me está abriendo las puertas del paraíso.
Los habitantes del pasillo, de las casas que dan al pasillo, ellos, son los que sin duda guardan una cantidad apreciable de muertos en sus memorias. Historias de personas, de muchas personas, tres o cuatro familias; no sé por qué anoté que en la intimidad de esos pasillos, en el lugar donde terminan, y tampoco sé si el lugar es tan solo geográfico o tiene que ver con el tiempo y su jugarreta, hay muertos que anidan muerte.
Creo en una muerte que no asuste como muerte, busco en los muertos de los pasillos el nacimiento de sus historias, de la memoria, busco el cotidiano de aquellos que ya no están para que regresen por un rato a la casa, al pasillo, a los vecinos, al barrio.
Quizá mi predilección por los pasillos tenga su raíz en los relatos de mi viejo. Rolando caminó gran parte de su infancia en los pasillos de varios conventillos. Habitaciones, puertas de habitaciones, patio pequeño, piletas, baño compartido, y siempre el pasillo, el maravilloso mecanismo de invención humana que llevaba afuera, y que en un segundo era capaz de permitir el tránsito hacia adentro. Pasillo para salir a jugar a las bolitas, a la pelota, a la billarda, a hacer la cola para comprar kerosene; y pasillo para buscar el refugio en la habitación única en la que dormían seis; acá nomás, en el barrio, sobre avenida Independencia, entre Colombres y Castro Barros.
Entre las salidas y los regresos por ese pasillo, mi abuelo, Julio Martín, el poeta, se jugó una aventura creativa cuando la extrema maldad de la pobreza se lo quería llevar, a él y a la familia, a pasar una temporada en la calle. Julio estaba apremiado allá por los primeros años de la década del 40, y el desalojo era el mayor de los espantajos. La pieza corría peligro, la gran noche se venía encima cuando supo que el desalojo tenía turno para la mañana siguiente. Mi abuelo había hecho el encargo, números enlozados, números para direcciones, y durante la noche anterior salió con tornillos de más y un destornillador. Mi viejo iba de ayudante. Julio Martín cambió los números del conventillo y el de uno de los vecinos. Cuando llegó la mañana del desalojo, el mandamiento, la papeleta judicial no coincidía. Mi abuelo ganó tiempo, y en ese tiempo pudo acomodar los tantos. Claro, no era lo que correspondía, pero así la escritura de las vidas posibles; la creativa ilegalidad del abuelo le salvó el pasillo, en este caso, para entrar a la pieza. En el terreno de ese mismo conventillo mi viejo, cuando la iba tan de pibe de diez años, enterró una lata con bolitas. Estableció un mapa del tesoro, que, como siempre ocurre, termina perdiéndose. Nunca encontró sus bolitas y salió por el pasillo a la calle, a jugar para ganar nuevas. Guardo en mi casa un frasco con bolitas; están las de él, esas bolitas que rodaron por el pasillo del conventillo, y las bolitas con las que jugaba yo, y recién ahora, mientras escribo, me doy cuenta de que mis bolitas rodaron por el pasillo de mi casa paterna. La casa de Martín Coronado es de frente casi inexistente, casa de cara flaca, y la puerta se abre al primer tramo del patio, bien podría ser principio de pasillo, que luego se ensancha manzana adentro. Pero sólo una historia en la casa de la provincia: la nuestra.
Entonces mi mirada podría estar alimentada por estos dos pasillos acuñados en el tiempo. Pero hay más pasillos, por ejemplo, sé que las mujeres más hermosas al parecer eligen refugiarse en el tránsito de este tipo de pasillo. Un placer mayúsculo es pararse frente a un pasillo, durante la noche, sabiendo que a uno lo esperan manzana adentro, y que en la noche del pasillo cuenta minutos una piba de barrio mientras prepara una ensalada.
En la ensalada el mejor símbolo para esta vida. Sal, aceite, vinagre, y pasillos que llevan al fondo.
Un puñado de olas acomodadas en un pasillo da origen a una escalera, y ésta también puede invitar; el Gordo González lo sabía, por eso no se preocupó de que no fuera un pasillo en profundidad el que llevara hasta la altura de Boedo XXI. Importa que el pasillo invite, y que luego del convite, lleve, transporte, hacia algún lugar de la tierra, el cielo, la manzana o el espíritu.
Me gustan los pasillos, me voy por ellos, les hago mis fotos, porque en ellos quizá sospeche el origen de la historia, de las personas.
En esta arquitectura de la locura, de la velocidad (cada vez que escribo la palabra velocidad pienso en la película de Marcelo Schapces La velocidad funda el olvido), en este mundo globalizado, busco mi refugio en las imágenes de los pasillos. Pasillo al fondo, donde viven las palabras de los muertos, donde puede rescatarse el ejemplo, la manera de ser de la persona verdadera de las personas.
En el pasillo, al fondo, quizá descanse la clave para entender que el todo vale es mentira. En el interior de las manzanas, hasta en el interior de las ensaladas, existe, sigue existiendo, la posibilidad de la memoria, de la resistencia, del compromiso, de la solidaridad.
Siempre las llevo conmigo; mis patrias internas quizá se identifican, o mejor, se fundan, en los pasillos de Buenos Aires, en la de adentro y en la de afuera. Porque no hay una sola ciudad, Buenos Aires es como la puerta del pasillo. En el camino hacia el corazón profundo se puede encontrar la otra fundación.
Edgardo Lois




POEMA
ANDANZA POR UNA CALLE CON ESPECTROS
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Podría darse que yo olvidase el nombre de ese barrio,
el nombre de esa calle que viene a mí desde el pasado;
que pasase acaso un día por ella silbando un viejo tango,
pero del barrio mismo, qué olor a memoria que exhala su plaza,
esos árboles de ciudad cuyas ramas ignoran el peso del fruto
para entregarse a sus gestos, y cuyas hojas, hoy otoñales,
juegan todavía a dejar caer sus sombras sobre los canteros
[para luego cubrirla;
ese pardo gorrión triste que alza vuelo –abanico del aire–
llevando la cruz de la tarde en sus alas,
el afinador del poniente con sus trémulos dedos de ébano,
aquellos rostros difuntos,
la casa deshabitada y misteriosa que dije
–toda esa parte de mí que ya es de otros–
y ese violín violeta en la vertiente de la bruma,
siempre me retendrán,
siempre me retendrán.

Lysandro Z. D. Galtier




EDITORIAL
Barbijos
La rutina diaria de un porteño acusa ciertas ventajas de la metrópoli: todo trámite burocrático que tenga que llevarse a cabo puede circunscribir su radio de acción en veinte manzanas del centro de la ciudad. Hacia ellas converge el delta de los túneles del subterráneo y basta con treparse a uno de ellos para que, en breve tiempo uno pueda estar llenando el formulario y pagando –¿alguna vez se cobra?– en alguna oficina pública o sucursal bancaria. El viaje en subte –exclusividad porteña si las hay– tiene lo suyo: seguridad, rapidez, ausencia de congestión de tránsito, pero comparte con los demás medios de transporte el amasijo de las “horas pico”. En el “D”, a esta altura, sólo faltan los célebres empujadores japoneses.
Si uno es habitué de un horario determinado suele encontrarse con las mismas caras que despliegan las mismas manías cotidianas: un diario leído en equilibrio, un maquillaje de apuro, un conveniente apoliyo que exime de la cesión de asiento...; todo es parte de una rutina que no deja lugar para sorpresas mayores. Una excepción resalta como una mosca en la leche. ¡Pobre señora!, debe tener una complicación respiratoria severa para andar con barbijo –pienso–, y vuelvo al crucigrama.
Perú, descenso y después. Un par de cuadras de Florida y dos barbijos más, esta vez en los rostros de una parejita joven... ¿Vivís en un submarino, no sabés lo de la gripe porcina? –me tira un compañero ante el interrogante. –Sí, ¿y? En los días siguientes se agotan los barbijos y quintuplican su precio. En los noticieros de televisión puede verse a los empleados de Ezeiza con sus rostros embozados por el adminículo, algunos de ellos luciendo los que se usan industrialmente para labores de operarios de lijados y pintura, de completa inutilidad para aislamiento sanitario.
Que no “panda el cúnico”, recuerda el Chavo, pero no le hacen mucho caso. Si hasta la OMS (Organización Mundial de la Salud) lleva a nivel 5 el alerta de pandemia. Advierto, sin embargo, ante tanta alarma, un signo positivo: ha desaparecido el dengue. Sí, porque como se sabe, lo que no está en televisión no existe, y el dengue desapareció de las pantallas, así que debe haberse extinguido por un compensador trueque divino: chanchos por mosquitos. El Glifosato debe de haber regenerado los batracios que antes mató y se deglutieron a los Aedes, o algo así. ¡Corramos a la farmacia por nuestro Tamiflú antes que opere la fecha de vencimiento! ¿Cómo? Sí, es el que quedó de la peste de “gripe aviar” que iba a arrasar a media humanidad pero que sólo produjo un poco más de cien muertos en todo el planeta. Entonces el antiviral no se necesitó y fue a depósito. ¡Pero ahora sí va a ser necesario porque ésta se contagia, no como aquélla!

Muchas veces la imprevisión se asoció a las epidemias y en más de un lugar de nuestro país la historia recoge cantidad de ejemplos que corroboran tal afirmación. De manera que las comprobaciones científicas impongan límites y barreras sanitarias, juntamente con medidas de profilaxis, no es algo que tenga que tomarse a la ligera. Otra cosa son las obsesiones inducidas por la morbosa necesidad de los medios y los negocios de los laboratorios.
Hacerle el juego a este tipo de difusión interesada introduce una nueva paranoia que amenaza con destronar a la “inseguridad” –pobre De Narváez, lo dejaríamos sin argumentos– y, de paso, contribuimos a instalar el miedo, ese viejo aliado del sometimiento.
Mario Bellocchio




VER, LEER Y ESCUCHAR
Crítica literaria, teatral y discográfica de producciones que no cuentan con el gran circuito de difusión

MARX EN EL SOHO de Howard Zinn
Teatro: Pan y Arte. Intérprete: Carlos Weber. Dirección: Manuel Callau

Muchos hablan de Karl Marx: algunos, conocedores del tema –profesores, estudiantes, economistas–, otros, lo denostan a partir de la ignorancia, siempre pronta a consumir productos en mal estado. Sus detractores no suelen referirse a él como a un científico de la economía política, como a un profundo investigador del mundo social en el cual los hombres producen y reproducen su existencia –no olvidemos que junto con Weber y Durkheim es considerado uno de los padres de la Sociología–.
Quienes sólo critican al Marx político, seguramente quieren referirse al Marx del Manifiesto, que con certeza no leyeron; y el reduccionismo –nada inocente por cierto– lleva a la satanización del más grande investigador del sistema de producción capitalista.
Mucho es lo que se ha hablado, se habla y se hablará de Marx. Pero lo que nunca sucede es que lo oigamos hablar a él y, menos aún, que nos cuente su vida y nos converse sobre su obra. Y esto es precisamente lo que ofrece el espectáculo estrenado el 1º de mayo en el teatro Pan y Arte, Marx en el Soho, dirigido por Manuel Callau y protagonizado por Carlos Weber.
Su autor, Howard Zinn, politólogo e historiador social estadounidense, es quien escribiera A People’s History of the United States, un trabajo monumental en el cual afronta la enorme tarea de, a partir de otro ángulo, producir una mirada crítica de su país.
En Marx en el Soho, el propio Marx relata su vida y obra mirando a los ojos a los espectadores, expresando sus amores, personales y profesionales, sus enojos, su lucha y su apasionado fervor por el progreso de los hombres. Asistir a la magnífica interpretación de Weber y apreciar el profundo trabajo de dirección realizado por Callau trasciende el hecho teatral. Es una experiencia por la que vale la pena atravesar. (M.V. A.)

NEW YORK, NEW YORK de Gustavo Soler
Editorial Corregidor, Buenos Aires, 2009
Poemas en Nueva York y sobre Nueva York, sobre cosas de esa metrópoli y de otras, y sobre las asociaciones inevitables que la mención de lo norteamericano trae a la conciencia de la cultura actual. Gustavo Soler asume el papel esencial de testigo como determinación impuesta a quien ha contemplado grandes hechos. En esa posición del poeta se halla la trascendencia y la dignidad de este libro, uno más dentro de una obra destacada que ya con anterioridad había tocado ese tema magno, en American stress.
Es el fin del imperio, la consumación de un ciclo, la finalización de una etapa cuya agonía viene infligiendo duros sufrimientos a la humanidad. Pero es, al mismo tiempo, el amanecer del hombre occidental a una intemperie en la que nada se divisa, la ruina aparentemente final de una larga tradición de racionalismo, de una lucidez buscada con afán. La desaparición del “modo de vida americano” –o su transformación en algo groseramente antagónico a aquello que fue promesa universal– significa la abolición de siglos de esperanza, la negación de las profecías laicas, del orden democrático e igualitario, de la libertad de las praderas, de la enseñanza del leñador.
Y no, no es poca cosa: el poeta sabe que “en Asia brilla el sol” pero que aquí: “los gerentes perdieron la batalla, / los policías perdieron la batalla…” Con cruel ternura recuerda que “Hilary es hermosa, una mujer americana / sin problemas de infancia / ni amores contrariados. / Una mujer que habla con su hija / y celebra las pascuas con unción / anglicana. // Hilary representa el temple de esta tierra, / los colores, los cowboys, la madre / que recogió / su falda para cazar bisontes. / Ella es eterna, tenaz y apasionada / como la gesta / que intenta recorrer por ella misma”. (F. S. Z.)

UVAS DEL PARAISO de Alejandro Drewes
Editorial Francachela, Buenos Aires, 2008
En una de ésas, el mito del eterno retorno no es, quizá, sino un paliativo inventado por el hombre para enfrentar el sufrimiento que entrañan las sucesivas ausencias que impone la vida: “Todo se va, todo se pierde”, nos dice una voz severa pero enseguida asume tono paternal y consolador y completa la sentencia: “Pero todo ha de volver…” ¿Y si no volviera? ¿Y si todo dejase de ser para siempre y cada uno de nuestros presentes entrañase, de aquí en más, una carencia definitiva y el único sentido de las cosas fuese el cambio heraclitano?
Alejandro Drewes viene del quehacer científico y ha anclado, por ansias vitales y por sensualidad mística, en el puerto de la poesía, de antemano convencido de que, en su versión ingenua, ese mito no es sino un testimonio del amanecer de la inteligencia. “Hay un exilio, somos el exilio -piensa- y en él el retorno es el no ser”.. Y nos lo dice sin ambages, con inusual plenitud poética: “Los pies avanzan / por grises ciudades / y nube tras nube.”; o bien: “Del hogar lejos / morarán los huesos / secos los hijos”. Su relato es, pues, necesariamente, un relato del exilio, en el que el mundo es el exilio duro por el que se transita para volver a ser al no ser. Una araña hila y la tela que produce es lo tangible, lo alterable, lo inasible, lo que se ama y odia y, en todo caso, llora.
Forzosamente la voz del poeta se torna un clamor en el desierto, aunque entretanto tenga amigos y suscite emoción: “Caminaron -dice- el puente de los siglos / hasta el oscuro país de la Araña, donde sus llagas / al fin descansaron de su abrigo de efímera carne”. En esa desolación está la paz, está el exilio y también el único retorno posible que es el retorno a la nada. Según está preceptuado, Drewes finaliza su oración con un Gloria Mundi. (F. S. Z.)





CULTURA GRATUITA
Guía de actividades culturales barriales que no requieren erogación alguna

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BAIRES POPULAR

CINE EN LA BALEAR: En mayo:
Viernes 29, a las 18.30 en la Balear (Colombres 841)
“Próxima salida”
(2004) Dir.: Nicolás Tuozzo
Darío Grandinetti, Ulises Dumont, Mercedes Morán, Pablo Rago.
Cinco personajes de distintas edades ven modificadas sus vidas a raíz del cierre de un ramal ferroviario

Muestras de Arte en Cafés Notables:

Alejandra Salgado.
Nacida en Buenos Aires, estudió diseño gráfico en la UBA. En dibujo, recibió enseñanzas del maestro Carlos Terribili.

Inauguración: lunes 11 de mayo las 19 hs., en el café Margot.

Permanece en exhibición en los horarios de atención del bar durante todo el mes de mayo.

Todos los sábados de 11 a 14:

Mesa de publicaciones:

periódico Desde Boedo, Ediciones BP, Papeles de Boedo y otras publicaciones y ediciones barriales. En la vereda del Café Margot. Venta de material fotográfico (Boedo antiguo) de la colección “Desde Boedo”, restaurado por Mario Bellocchio.

El primer sábado de cada mes a las 17:

Buenos Aires esquina Boedo.

Ciclo de presentaciones con ilustración musical, conduce Rosa María Silva. En “Esquina O. Pugliese” (Boedo y C. Calvo).

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Museo Monte de Piedad

(Boedo 870, 2º piso por escalera)

Tel.: 4 931-8204/ 4 931-1605; Fax: 4 932-4680,

E-mail: museo@bancociudad.com.ar
HORARIOS DE VISITA AL MUSEO: Lunes, miércoles y viernes de 10 a 17. Martes y jueves 10 a 20. VISITAS GRUPALES: concertarlas telefónicamente.

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Enrique Kaminsky - placa recordatoria

El día sábado 16 de mayo, a las 17.30 hs.,

la Junta de Estudios Históricos del Barrio de Boedo descubrirá,

en “Esquina Sur”, una placa recordatoria de Enrique.
Posteriormente a las 19 hs. se celebrará una misa en homenaje a todos los socios fallecidos, tanto de la Junta como de la Cofradía de la Orden del Lengue, en la Iglesia de San Bartolomé.
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Espacio Cultural Julián Centeya

San Juan 3255 - Tel: 4931-9667


Ministerio de Cultura - Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires


Muestra permanente de pinturas del artista plástico Alejandro Gabriel Fernández que se puede visitar durante todo el año donde el autor recrea la pasión del tango de ayer y de hoy.

Sábado 09/05. Música. A partir de las 20hs Se presentarán las agrupaciones “Viento en Contra” (Cuarteto de saxos) y “Jazz x 3” (Bossa nova jazz blues)

Domingo 10/05. Teatro infantil. 16hs “El soplador de estrellas” por la Compañía del Balero Autor: Ricardo Talento / Dirección: Marta Silva

Domingo 10/05. 19 a 22hs. Tangódromo Clase de tango y milonga abierta Profesores: Laura Zaracho y Emiliano Gonzalez

Sábado 16/05. Música. 20.30hs. “Osvaldo Gallo Jazz Cuarteto”. Blues, Jazz y Bossa.

Domingo 17/05. Teatro infantil. 16hs “El Rey Enano” Autor y Director: Gabriel Virtuoso

Domingo 17/05. 19 a 22hs. Tangódromo. Clase de tango y milonga abierta. Profesores: Laura Zaracho y Emiliano Gonzalez

Sábado 23/05. 20.30hs. Tangos de época (tango de fines del 1800 y principios del 1900) Orquesta “Antigua Fray Pimiento”

Domingo 24/05. Teatro infantil. 16hs “El soplador de estrellas” por la Compañía del Balero Autor: Ricardo Talento / Dirección: Marta Silva

Domingo 24/05. 19 a 22hs. Tangódromo. Clase de tango y milonga abierta. Profesores: Laura Zaracho y Emiliano Gonzalez

Sábado 30/05. 20hs. Ciclo de Blues en el Julián Centeya Cada último sábado del mes, de un show de jerarquía. La programación se extenderá hasta el mes de noviembre. Para el primer concierto, Blues & Trouble

Domingo 31/05. Teatro infantil. 16hs. “El Rey Enano” Autor y Director: Gabriel Virtuoso

Domingo 31/05. 19 a 22hs. Tangódromo. Clase de tango y milonga abierta. Profesores: Laura Zaracho y Emiliano Gonzalez

TODAS LAS ACTIVIDADES CON ENTRADA LIBRE Y GRATUITA
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U. Amb. y de Gestión PARQUE AVELLANEDA

Complejo Cultural Chacra de los Remedios

Circuito de Espacios Culturales.

Dirección General de Promoción Cultural.

Subsec. de Gestión Cultural. Ministerio de Cultura GCABA


Actividades Culturales de Mayo 2009


SÁBADO 9 A partir de las 14 hs. Artesanos muestran y demuestran. Lugar: Frente al Mástil. Artesanías urbanas y talleres.14.45 hs. Tarde de Chicos: “El Circo Caramelos”. Lugar: Centro de Artes Escénicas Antiguo Tambo.Grupo de Teatro “Seguimos con uno menos”. Dirección: Fabián Caero. 15.30 hs. Encuentro de Danzas Circulares. Lugar: Espacio al aire libre entre La Casona y el Antiguo Tambo. 17 hs. Ciclo “Cine del mundo” Homenaje a Paúl Newman. Lugar: Microcine de La Casona de Los Olivera. “Las cosas de la vida”. Dir. Robert Benton. Protagonistas: Melanie Griffith, Paúl Newman, Bruce Willis. País: EEUU. Año: 1994. Duración: 110'. Calificación: +13 años. 17hs. Charla-debate: "El diálogo en la construcción de una cultura democrática". Lugar: Medioteca de La Casona. Con el escritor, filósofo y bibliotecario Lic. Ernesto Iancilevich. 18hs. Teatro de Sala. “Las del Barranco” de Gregorio Laferrere. . Lugar: Centro de Artes Escénicas Antiguo Tambo Producida por “Resurgimiento Teatral” y dirigida por Graciela Baduán.


DOMINGO 10 9 a 15hs. “Jornada para la calidad de vida”. Lugar: Huerta Orgánica y Medioteca de La Casona. A partir de las 14 hs. A partir de las 14 hs. Artesanos muestran y demuestran. Lugar: Frente al Mástil. Artesanías urbanas y talleres.15hs. Tarde de Chicos. "Comunacha de vereda" por el grupo "El busca tiempos". Lugar: Espacio abierto alrededor de La Casona de los Olivera. Espectáculo callejero de títeres para todo público.15.30 hs. “Encuentro de Coros”. En un recorrido por distintos puntos del parque. 19hs. Ciclo Verdedanza. “Sudaka”. Por el grupo Casta Diva. Lugar: Centro de Artes Escénicas Antiguo Tambo.Coreografía y dirección a cargo de Mónica Frecchia.


JUEVES 14 15.45 hs. Ciclo de Cine “Otra Mirada”. Tiempo & Evolución. Lugar: Microcine de La Casona de Los Olivera. “Espartaco”. Dir. Stanley Kubrick. Protagonistas: Kirk Douglas, Toni Curtis, Laurence Oliver. País: EEUU. Duración: 196'. Año: 1960. Calificación: +13 años.

VIERNES 15 17 hs. Ciclo de Cine “Otra Mirada”. Tiempo & Evolución. Lugar: Microcine de La Casona de Los Olivera. “El Nombre de la Rosa”. Dir: Jean-Jacques Annaud. Protagonistas: Sean Connery, Christian Slater. País: Francia. Duración: 120'. Año: 1986. Calificación: +13 años.

SABADO 16 A partir de las 14 hs. Artesanos muestran y demuestran. Lugar: Frente al Mástil. Artesanías urbanas y talleres. 14.45 hs. Tarde de Chicos: “El Circo Caramelos”. Lugar: Centro de Artes Escénicas Antiguo Tambo.17 hs. Ciclo “Cine del mundo” Homenaje a Paúl Newman. Lugar: Microcine de La Casona de Los Olivera. “El Estigma del Arroyo”. Dir: Robert Wise. Protagonistas: Everett Sloane, Paul Newman, Steve McQueen. País: EEUU. Año: 1956. Duración: 114'. Calificación: +13 años. 17hs. Música en el Parque. “La Pistraca”, (Rock). Lugar: Escenario Playón Antiguo Tambo. 17hs. Promoción de lectura y escritura. “Abrir la puerta y salir a leer”. Lugar de Encuentro: Medioteca de la Casona. Actividades dirigidas a niños, jóvenes y adultos. 18hs. Teatro de Sala “Orquesta de Señoritas”, de Jean Anohuil. Puesta y dirección de Claudia Cesetti

DOMINGO 17 A partir de las 14 hs. Artesanos muestran y demuestran. Lugar: Frente al Mástil. Artesanías urbanas y talleres. 15hs. Tarde de Chicos. "Comunacha de vereda" por el grupo "El busca tiempos". Lugar: Espacio abierto alrededor de La Casona de los Olivera. Espectáculo callejero de títeres para todo público. 15.45hs. Teatro Callejero. “1789, Algo sobre la revolución Francesa” por el Grupo “Elenco Estable”. Con la Dirección Gral. y puesta en escena de Héctor Alvarellos. Lugar de encuentro: Directorio y Lacarra. 17hs. Teatro Callejero. “Personas que aman demasiado”. Grupo “Tercer Cordón”. Lugar: Espacio abierto lindero al Jardín de la Meditación. 17hs. Tarde de lectura. Los Abuelos Narradores, harán intercambio de cuentos cortos para leer bajo la Morera. Lugar de encuentro: Medioteca de La Casona. 17.30hs. Música en el Parque. “Los Corazones Del Plata”, (Folklore). Lugar: Centro de Artes Escénicas Antiguo Tambo.

JUEVES 21 17 hs. Ciclo de Cine “Otra Mirada” Tiempo & Evolución. Lugar: Microcine de La Casona de Los Olivera. “El Acorazado Potemkin”. Dir. Sergei M. Eisenstein. Protagonistas: Alexandre Antonov, Vladimir Grigorievitch Barsky. País: Rusia. Duración: 81'. Año: 1925. Calificación: ATP.

VIERNES 22 17 hs. Ciclo de Cine “Otra Mirada” Tiempo & Evolución. Lugar: Microcine de La Casona de Los Olivera. “Tiempos Modernos”. Dir. Charles Chaplin. Protagonistas: Charles Chaplin, Paulette Goddard, Henry Bergman. País: EEUU. Duración: 89' Año: 1936. Calificación: ATP.

SABADO 23 A partir de las 14 hs. Artesanos muestran y demuestran. Lugar: Frente al Mástil. Artesanías urbanas y talleres. 14.45 hs. Tarde de Chicos: “El Circo Caramelos”. Lugar: Centro de Artes Escénicas Antiguo Tambo. 17 hs. Ciclo “Cine del mundo” Homenaje a Paúl Newman. Lugar: Microcine de La Casona de Los Olivera. “El Zoo de Cristal”. Dir. Paúl Newman. Protagonistas: Joanne Woodward, John Malkovich, Karen Allen, James Naughton. País: EEUU. Año: 1987. Duración: 134'. Calificación: +13 años. 16hs. Música en el Parque. “Sumaia O”, (Fusión Étnica). Lugar: Escenario Playón Antiguo Tambo.17hs. Ronda de lectura de cuentos clásicos y contemporáneos. Lugar: Medioteca de La Casona. Para niños y jóvenes con distintos narradores-vecinos a cargo de la Prof. Andrea Lewy Smith.18hs. Teatro de Sala “Orquesta de Señoritas”, de Jean Anohuil. Puesta y dirección de Claudia Cesetti

DOMINGO 24 A partir de las 14 hs. Artesanos muestran y demuestran. Lugar: Frente al Mástil. Artesanías urbanas y talleres. Exposición de artesanías urbanas y talleres abiertos al público. 15hs. Tarde de Chicos. "Comunacha de vereda" por el grupo "El busca tiempos". Lugar: Espacio abierto alrededor de La Casona de los Olivera. Espectáculo callejero de títeres para todo público.16hs. Teatro Callejero. “Las Aves”. Lugar: Diversos espacios del parque. Muestra de alumnos del curso de formación del actor para espacio abierto. 17hs. Tarde de lectura. Lugar de encuentro: Medioteca de La Casona. Los Abuelos Narradores, harán intercambio de cuentos cortos para leer bajo la Morera. 17.30hs. Música en el Parque. “Boleros y Canciones del mundo". Lugar: Escenario Playón del Antiguo Tambo.Por Anabella Paraber (voz), Mariano Botto y Juan Manuel Castro (guitarras).

LUNES 25 A partir de las 15 hs. Festejos por el 25 de Mayo. Lugar de encuentro: Directorio y Lacarra. Representación histórica e irónica “Viaje al pasado”. C/particip. y colab. de Actores Culturales, Adm. de la U.A. del Parque y del C. C. Chacra de Los Remedios.

JUEVES 28 17 hs. Ciclo de Cine “Otra Mirada” Tiempo & Evolución. Lugar: Microcine de La Casona de Los Olivera. “Fahrenheit 451”. Dir: François Truffaut. Protagonistas: Julie Christie, Oskar Werner, Cyril Cusack, País: Gran Bretaña. Duración: 98'Año: 1966. Calificación: ATP

VIERNES 29 17 hs. Ciclo de Cine “Otra Mirada” Tiempo & Evolución. Lugar: Microcine de La Casona de Los Olivera. “La Máquina del Tiempo”. Dir. George Pal. Protagonistas: Rod Taylor, Alan Young, Yvette Mimieux, País: EEUU. Duración: 103'. Año: 1960. Calificación: ATP.

SABADO 30 A partir de las 14 hs. Artesanos muestran y demuestran. Lugar: Frente al Mástil. Artesanías urbanas y talleres. 14.45 hs. Tarde de Chicos: “El Circo Caramelos”. Lugar: Centro de Artes Escénicas Antiguo Tambo. 16hs. Música en el Parque. “Paz Quintana”, (Folklore Urbano). Lugar: Escenario Playón del Antiguo Tambo.16hs. Lectura y taller de cuentos, poesías y leyendas. “Que nos dicen los árboles… la voz del parque”. Lugar de Encuentro: Medioteca de la Casona. Basados sobre las especies arbóreas del Parque Avellaneda, a cargo de la Prof. Andrea Lewy Smith. 17 hs. Ciclo “Cine del mundo”. Homenaje a Paul Newman. Lugar: Microcine de La Casona de Los Olivera. “Noche larga y febril”. Dir. Martin Ritt. Protagonistas: Paul Newman, Joanne Woodward, Orson Welles.EEUU. Año: 1958. Duración: 115'. Calificación: +13 años. 18hs. Teatro de Sala “Orquesta de Señoritas”, de Jean Anohuil. Puesta y dirección de Claudia Cesetti

DOMINGO 31 A partir de las 14 hs. Artesanos muestran y demuestran. Lugar: Frente al Mástil. Artesanías urbanas y talleres. 15hs. Tarde de Chicos. "Comunacha de vereda" por el grupo "El busca tiempos". Lugar: Espacio abierto alrededor de La Casona de los Olivera. Espectáculo callejero de títeres para todo público.16hs. Teatro Callejero. “Las Aves”. Lugar: Diversos espacios del parque. Muestra de alumnos del curso de formación del actor para espacio abierto. 17hs. Teatro Callejero. “Personas que aman demasiado”. Grupo “Tercer Cordón”. Lugar: Espacio abierto lindero al Jardín de la Meditación. 17hs. Tarde de lectura. Lugar de encuentro: Medioteca de La Casona. Los Abuelos Narradores, harán intercambio de cuentos cortos para leer bajo la Morera. 17.30hs. Música en el Parque. “Tangos de Ayer y Antiayer”, con “Raquelina Mesch”. Lugar: Centro de Artes Escénicas Antiguo Tambo”.


Centro de Exposiciones y Muestras de Arte Contemporáneo La Casona de los Olivera - Hasta el 14 de Junio “Infancia” Los artistas que participan de esta muestra nos proponen abordar el mundo de la infancia a partir del encuentro con imágenes, objetos y lugares que remiten a esa etapa de la vida tan fugaz, y a la vez tan fundante.
Artistas: Morena Maehashi (Escultura) - Jimena Peruyera (Objeto) - Florencia Sabattini (Grabado)- Luis Sens (Fotografía) - Pablo Mattioli (Pintura) - María Laura Vázquez (Fotografía) - Laura Ortego (Fotografía) María José D`Amico (Fotografía)
Actividades en el marco de la muestra: Se realizará una función de “Kamishibai”, teatro de papel japonés, que en esta ocasión presenta un formato en el que se mezclan la narración, la poesía, la música e imágenes. Domingo 14 de Junio a las 18 hs. en La Casona de los Olivera. Horario de Visitas: Martes a viernes de 14 a 19 / Sábados, domingos y feriados de 11 a 19.Visitas Guiadas: domingos a las 16, 17 y 18 hs.


"Arte Contemporáneo en Familia” Domingo 31 de mayo, 16 hs. En la Casona de los Olivera. Recorriendo las obras de arte de la muestra “Infancia” se realizarán actividades para explorar, imaginar, sentir, pensar, jugar y expresarse. Cupo Limitado. (chicos a partir de 6 años). Reservas telefónicamente al 4 671-2220 de martes a viernes de 10 a 17hs.


La Casona de los Olivera convoca a Artistas Plásticos y Artesanos para exponer en su “Sala Vecinal” Camino a la reapertura de la “Sala Vecinal”, convocamos a artistas plásticos y artesanos en todas sus formas y géneros, interesados en exponer y presentar sus obras. Invitamos a todos aquellos que deseen exhibir sus producciones y proyectos, a presentar una imagen de su obra (impresa o en cd), especificando técnicas y medidas), incluyendo además: datos del artista (mail, teléfono), currículo, memoria o descripción de la obra. Acercar la documentación de martes a viernes de 10 a 19 hs. a La Casona de los Olivera. Av. Directorio y Lacarra, Parque Avellaneda. Informes: De martes a viernes de 10 a 19 hs. al 4671-2220


TALLERES VECINALES
TALLER DE DANZAS FOLCLÓRICAS todos los sábados 17 hs.Para compartir música, danzas y una fraternal ronda de mate. Coordinado por el Prof. Aníbal Castro Ruiz. Lugar En el Gimnasio del Polideportivo del Parque Avellaneda: Lacarra 1257.


ENSAYOS Y TALLER DE LA MURGA: viernes 17.30hs. en el playón del antiguo tambo y domingos 16hs. en la escultura “la tejedora” “Los descarrilados de Parque Avellaneda”.(Entrando por Directorio y Lacarra)


TODAS LAS ACTIVIDADES SON LIBRES Y GRATUITAS.


LA PROGRAMACIÓN ESTA SUJETA A CAMBIOS SIN PREVIO AVISO.LOS ESPECTÁCULOS Y FUNCIONES DE CINE ESTÁN SUPEDITADOSA LA CAPACIDAD DE LAS SALAS. EN CASO DE LLUVIA SE SUSPENDEN LAS ACTIVIDADES AL AIRE LIBRE


Complejo Cultural Chacra de los Remedios

Parque Avellaneda Av. Directorio y Lacarra.

Informes: 4 671-2220


Líneas de colectivos que te acercan: 4,5,7,36,46,49,55,88.92,104,107,114,126,155,180,182. ...........................................................




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